viernes, 26 de febrero de 2010

Despues de la muerte "Cap 03" - Jazzy W.


Los personajes son de Stephenie Meyer

Capitulo 3

No quiero estar solo

Sabía que no tenia por que estar desaprovechando mi tiempo con el teniendo la boca cerrada, pero no sabía que decir, no sabía que esperar, de hecho estaba disfrutando del silencio, pero del silencio en compañía, ha ese grado extrañaba tanto el contacto con las personas, el tenia la espalda rígida, que tonta, para el debería estar siendo bastante difícil tener a un fantasma siguiéndole las espaldas.

-Edward-, musité y el me miró sin dejar de caminar

-¿Desde cuando eres así?-, le pregunté, en un absurdo intento de que el me hablara, de que todo se hiciera mas ligero, mala elección de pregunta, el tensó la mandíbula y desvió la mirada, creí que no me contestaría pero comenzó a hablar en voz baja y atrayente.

-Desde hace mucho tiempo, 1918-, murmuró

Era demasiado tiempo, ¿cuantas cosas habrá vivido, visto?, siempre así imperturbable y etéreo

-¿Quién te convirtió?-, pregunté en voz baja

-Carlisle…mi padre-, sonreí ante el lazo que lo unía a ese hombre, en cierta forma yo tenia que agradecer también a ese…vampiro, sin el, Edward no estaría aquí, ahora conmigo.

-¿Qué piensas?-, preguntó de pronto

-Nada-, musité como protección y el apretó los puños

-Lo siento, solo estoy agradecida-, le susurré y el frunció el ceño

-¿Por qué?-, preguntó contrariado y se paró totalmente encarándome

-Por que si el no te hubiera convertido, ahora no estarías aquí-, le dije sin mirarlo

Se removió incomodo y comenzó a caminar de nuevo

-¿Recuerdas como…?-, comenzó y yo asentí

-Como morí-, le completé y el asintió, por fin a lo lejos pude ver una enorme casa, mas parecida a una mansión de cuento que a cualquier casa que hubiera visto en Forks

-Dos hombres me atacaron como venganza a mi padre-, le musité y el me miró

-¿Por qué?-, preguntó

-No lo se-, le contesté y el se acercó, demasiado rápido, sus reacciones me dejaban contrariada pero no pude evitar disfrutar de su cercanía, sabía que era ilógico pero me hacia sentir calida, ojala lo pudiera sentir, ojala…

-¿Te lastimaron?-, preguntó en voz baja

-No…no antes de morir…solo me mataron-, tan absurdo como se oía, Edward asintió y siguió caminando

-¿Esta es tu casa?-, le pregunté mirando hacia la mansión…la enorme y elegante construcción que se alzaba en los adentros del bosque

-De Carlisle-, corrigió y caminó hasta que ambos estuvimos en la puerta.

-¿Crees…crees que alguien mas pueda verme?-, le pregunté y el tomó el pomo de la puerta

-Estamos por averiguarlo-, murmuró.

Los muebles, los cuadros, toda la decoración era exquisita y cara…

Edward siguió hasta la que parecía una estancia y una mujer hermosa de pelo color caramelo lo saludó abrazándolo…dejando de lado los ramos de hermosas flores que estaba arreglando

Desvíe la mirada incapaz de ver eso…mi deseo, ¡Quería abrazarlo!, moví la cabeza ante tal absurda idea y ella habló.

-¿Qué pasa Edward?-, lo miré y me di cuenta que el me estaba mirando a mi, suspiró y se giró hacia ella

-Nada mamá-, musitó y le dio un beso en la mejilla y comenzó a caminar de nuevo.

¡Mama!

Cuando estuvimos solos en lo que parecía ser el comedor de la enorme casa

El se llevó la mano al puente de la nariz.

-Ella es Esme, la compañera de Carlisle

-También es vampiro-, le aseguré y el asintió

-Tampoco puede verme-, le dije y el siguió caminando, entramos a una sala equipada con una gran televisión de plasma, juegos de video y otras cosas de entretenimiento, ahí había un hombre y una mujer, ambos hermosos, ambos supuse, vampiros…¿cuantos eran?

-Hola Eddie-, le saludó el otro con una gran sonrisa, el apodo parecía no sentarle nada bien

-¿No fuiste a cazar con Jasper y Alice?-, preguntó la mujer, Edward negó y me miró, negué, no, ellos tampoco me notaban

La mujer giró su cabeza hacia donde el miraba y frunció el ceño, se echó hacia atrás la melena rubia y entrecerró los ojos.

-¿Pasa algo Edward?-, preguntó mientras el otro hombre los miraba extrañado.

-Nada-, musitó y caminó hacia la salida.

-¿Quiénes son?-, pregunté

-Emmett y Rosalie-, contestó subiendo las escaleras, al parecer todos tenían…pareja…es decir el…

-¿Alguien mas vive aquí?-, murmuré

-Salvo Carlisle que esta en el hospital, no-, contestó mientras entrábamos a una habitación blanca, con demasiados libros y discos por doquier y un ventanal enorme que era un mural natural sorprendente.

-¿Hospital?-, murmuré y el asintió

-Carlisle es medico-, me contestó

-Un vampiro puede ser…-, comencé y el se encogió de hombros.

-Carlisle es mucho mas fuerte que todos nosotros juntos, jamás ha probado al sangre humana-, murmuró

Eso daba a entender que el si lo había hecho, antes, quizás, pues yo lo había visto cazar animales.

-Toda tu familia caza animales-, inquirí y el me miró sorprendió como si no esperar mi afirmación.

-Si-, contestó y de nuevo se acercó bastante

-¿Qué estas pensando?-, insistió

-¿Por qué lo preguntas?-, le murmuré

-No puedo leerte-, insistió y yo rodeé los ojos estaba hartándome de esas vueltas, me senté en el suelo con las espalda recargada en la pared, o eso suponía yo, en realidad no sentía tal estructura y el me miró

-Leo mentes…pero tu…-, comenzó y yo lo miré, fruncí un poco el ceño

-Tal vez no puedas por que en realidad ya no pienso…-, le dije y el me miró

-¿No sientes nada?-, preguntó y yo negué desviando la mirada.

-A veces quisiera que todo esto terminara-, le susurré y el se acercó sentándose a mi lado pero a cierta distancia.

Iba a hablar de nuevo pero la puerta se abrió y la chica llamada Alice apareció

-Rosalie me dijo que estabas raro-, dijo entrando a la habitación, me sentí incomoda como si estuviera siendo un intruso

-¡Y le creíste!-, respondió Edward medio sonriendo con ironía.

-Pero yo también lo creo-, dijo ella con los ojos entrecerrados, solo te veo aquí, ¿que pasa Edward? todo tu futuro esta envuelto en estas cuatro paredes.

Fruncí el ceño al escucharla, ya me había perdido, el se levantó y fue hasta ella.

-Estoy bien Alice, lo juro-, aseguró y le dio un beso en la mejilla, ella hizo una mueca pero suspiró y salió del cuarto

-¿Por qué dijo eso?-, le pregunté levantándome, tal vez tenia razón, yo no debía estar aquí, el se estaba alejando de su familia.

-Alice ve el futuro, o visiones de el, me vio pasando demasiado tiempo aquí-, se encogió de hombros y yo lo miré

-¿Todos tienen habilidades?-, le pregunté y el negó

-No, salvo Jasper que puede controlar las emociones, Alice y yo, nadie mas cuenta con algo especial-, hizo una mueca y yo miré hacia el ventanal

-¿Por qué solo tu puedes verme?-, le susurré y el se rió

-¿Por qué crees que tendría que saberlo?-, espectó

Apreté los puños y lo esquive, solo quería comprender, pero no tenia por que estarlo torturando de esa forma, el parecía no estar a gusto, no iba a obligarlo, además Alice tenía razón, ¿que futuro le esperaba en mi compañía?, bajé las escaleras y miré fugazmente como Alice y…Esme platicaban en la estancia, no le di importancia, traspasé la puerta sin abrirla… no lo necesitaba, casi lo traspaso a Edward también, en el porche el me esperaba.

-¿Dónde vas?-, pregunto parecía… ¿Asustado?

-Que importa-, le contesté

-Creí que querías compañía-, me espectó de nuevo

-No quiero que me hagas un favor-, le grité

-Olvídate que existo, te liberó de la carga del fantasma molesto-, seguí mientras el se acercaba

-Bella-, me llamó pero me giré para evitar mirarlo.

-No sabes lo que es la soledad-, le murmuré

-Demonios-, maldijo con su voz ya muy cerca.

-Girate, por favor-, lo hice y el tenia sus manos en puños a la altura de mis hombros, como si hubiera intentado tocarme y no hubiera podido hacerlo.

-Lo siento, no quería ser grosero-, murmuró

-Pues lo haz sido-, le dije enojada y el apretó la mandíbula

-Se que es cierto, pero trata de entender, esto, no es normal…jamás me imagine…-, comenzó pero se calló, no podía obligarlo a seguir así, entendí que debía ser horrible tener un fantasma a tu lado

-No quise molestarte en serio, será mejor que me vaya-, le musité y el avanzó un paso mas.

-No-, su voz retumbo en mi cabeza

-No quiero…estar…solo-, susurró y yo sentí que un estremecimiento me recorría entera

-No estas solo-, le recordé mirando a la casa

-Tienes una familia, aun con una existencia diferente, estas vivo….-, le dije y el negó

-Un muerto con vida, un muerto que jamás se ha sentido en su lugar, no sabia por que tenía que seguir viviendo hasta que te vi-, me dijo mientras yo fruncía el ceño.

-¿Y si ese es mi destino?, tu misma lo dijiste, si Carlisle no me hubiera convertido, tu seguirías sola….y yo estaba solo, me sentía solo hasta que te vi, hasta en mi familia, todos tienen a alguien…todos-, cerró los ojos y yo alcé mi mano, cuando daría por poder sentir su piel, un rostro de ángel herido.

-Pero no puedo ofrecerte nada-, le murmuré

-Tu amistad, tu voz, solo no desaparezcas, quédate aquí, conmigo, prometo tratar de no ser un margado-, terminó haciéndome reír

-¿Por cuánto tiempo?-, le dije insegura, algo en mi interior me decía que tenía la batalla perdida, yo ya no podía separarme de el ni aunque quisiera, pero también sabia que nuestra amistad, nuestra extraña relación que desde el principio hacia sido inesperada, nos condenaba a ambos, de alguna manera no podía durar para siempre.

-No importa-, me respondió y yo le sonreí

-Tampoco desaparezcas-, le pedí y el sonrió, miré como el auto lujoso se estacionaba frente a nosotros, de el un hombre joven, rubio y de un porte sublime se encaminó hacia nosotros.

-¿Carlisle?-, pregunté a Edward y el asintió tenuemente respondiéndome.

-¿Qué haces afuera?-, preguntó el hombre parecía contrariado, pues Edward solo estaba a unos cuantos pasos de la puerta sin hacer nada notorio

-Despejándome-, murmuró el con una sonrisa, su…padre lo miró extrañado pero también sonrió y entró a la casa si decir mas.

-¿Vamos a entrar?-, preguntó Edward mirándome y yo asentí, entré a una casa llena de vampiros, un fantasma que furtivamente convivía con ellos sin que ellos lo supieran, solo uno me miraba por lo bajo sonriendo mientras platicaba con su familia, solo uno…y eso bastaba

Había cruzado una línea lo sabia…donde me llevara mi decisión quizás ni Alice y su poder lo sabrían.

Edward no quería estar solo y yo ya no podía estar sin el.

2 comentarios:

  1. sin palabras o si una no dos me encantaaaaaaaaa

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  2. ES KE... ES KE... WUAU SOLO ESO ME A ENCANTADO!!!SIGUE ESCRIBIENDO

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Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...