jueves, 16 de septiembre de 2010

Sexo Apurado "Oneshoot"- Mixxii Lutz

Estaba resignada, segura de que eso era lo único que podía tener con el: sexo apurado con mucha pasión, peligro y adrenalina... Y realmente, no me quejaba ni mucho menos me importaba.
Rating: T


Mi vida era monotonía antes de conocer a mi profesor, mi amante y el único hombre en mi vida. No me importaba que estuviese casado, no me importaba que quizás no me amaba, todas esas inseguridades eran eclipsadas con el placer que el me brindaba en cada encuentro en el que reinaba el desenfreno y la pasión.

Tal vez sea una niña loca venerando a un profesor, pero el no era el típico hombre imperfecto cuya mujer lo ve perfecto…. El si era perfecto: Su pelo era cobrizo y despeinado, sus ojos verdes, su piel nívea y suave aunque firme, era alto y esbelto, sus labios redondeados y tentadores, nariz recta, todo un dios. Todo cambio esa noche, era la fiesta del curso, me arregle despampanante, me presentía que seria una noche excitante y digna de recordar. Pinte mis labios color rojo y deje que mis puntas inquietas cayeran mas arriba de mi hombro dándome un alaciado, quería verme diferente…solo para el.

Ambos borrachos y ambos casi inconscientes sabiendo que lo disfrutábamos y que era prohibido…y eso nos animo más. Me sentí amada, estando con mi profesor, saboreando el tabú de “lo indecente”, el que siempre era serio, amargado, orgulloso, hablaba con petulancia, soberbio, altivo….estaba allí, entre mis piernas moviéndose al ritmo del libertinaje, con sus manos en mi trasero apretándome y guiándome hasta encontrar la armonía perfecta entre nuestros cuerpos mientras me recalaba, gimiendo contra mis labios, quitándome la imagen de hombre cuya moral era irrompible y si, descaradamente acepto que me fascino eso.

Desde entonces el se convirtió en mi amor imposible súper accesible. Lo digo así por que quizás jamás tendré su amor, pero su cuerpo siempre estará conmigo. ¿Qué puedo esperar de un Dios griego expulsado del olimpo por su evidente belleza? No mucho, eso era claro, su cuerpo, y era demasiado. Quizás no me ame....lo confirmo. Pero eso no evita que pueda disfrutar de su cuerpo, vibrar de placer entre sus brazos ni corrernos unidos en recreo. Yo lo amaba, y era algo enfermizo, si no lo tenía junto a mi sentía que moría, me paraba en el umbral de su puerta y solo podía pensar en el tiempo que pasábamos juntos, cuando me penetraba o dios, cuando usaba esa lengua para…no hablar toda la idiotez que musitaba en clase.

Muchas cosas habían cambiado, el significado de su clase y de sus palabras se habían tornado mas excitantes que cualquier cosa. Cuando movía los dedos sobre el ordenador haciendo una tarea destinada para nosotros solo fantaseaba recordando como se movían sus dedos en mi interior, como masajeaba y frotaba mi botón de placer llevándome a los delirios más potentes que me hacían enloquecer. Cuando decía examen…lo imaginaba examinando mi cuerpo, acariciándolo, tocándolo. Si decía “Tienen que aprender” mi mente volaba y se preguntaba que era lo que su experiencia me enseñaría estando desnudos los dos, solos, apurados y sedientos el uno del otro.

Su clase era geografía, y cuando mencionaba las aguas solo podía pensar en la humedad que sentía en mi centro cuando lo tenía cerca, cuando me incitaba y me excitaba… y me humedecía ansiosa esperando nuestro próximo encuentro. Cuando tocaba el mapa, imaginaba que era mi cuerpo, que lo apuntaba y me arrullaba entre sus dedos. Y cuando miraba a otra tipa, o alumna a los ojos mi cuerpo ardía en rabia, quería sacarle los ojos a la tipa que lo mirara con deseos, y su esposa, cada vez que iba y le besaba…. Como quería matarla con mis propias manos. El legalmente le pertenecía a ella, ¿Pero quien dijo que todo es legal y justo?

Mientras el daba su clase, mi imaginación afloraba y mi cuerpo se estremecía imaginando como seria nuestro próximo encuentro. A veces me miraba de soslayo y continuaba con la clase, una vez sus ojos pasaban por mi cuerpo este no se tranquilizaba. Mire el reloj, faltaban 5 minutos para el recreo. Ya estaba ansiosa, ya quería sentirlo en mí, tenerlo cerca. Tal vez no son pensamientos propios de una dama pero eso ya no me interesaba, el era como el aire para mi, una necesidad que abastezco todos los días.

Tres minutos y ya dejaba escapar pequeños suspiros entre mis labios. Ya me estaba exasperando, era urgente. Los alumnos iban dejando el aula de clase y yo me empezaba a mover inquieta en el pupitre, el me miraba con una sonrisa traviesa y algo divertido, sabia todo lo que provocaba en mi, todo lo que me hacia sentir.

_ ¿Se le ofrece algo Señorita Isabella?_ pregunto juguetonamente cuando todo el mundo abandono el aula de clases. Me pare del asiento y sin vergüenza me fui quitando el chaleco de la escuela, luego me quite los botones de la camisa, pero me deje el sujetador puesto, el me lo quitaría. Camine sensualmente hasta su escritorio moviendo mis caderas de lado a lado mientras que su mirada escudriñaba mi cuerpo con anhelos de hacerme suya, y me encantaba.

_ Lo quiero a usted Señor Cullen_ susurre coqueta mientras rodeaba su cuello con mis manos atrayendo su cuerpo hacia mi. Aun con mi brasier y su camisa me estremecí cuando chocaron mis pechos con su tórax, no había palabras para describir lo que un solo roce suyo provocaba en mi cuerpo, era perfecto, me hacia olvidar todos los problemas y entregarme al placer junto a el enteramente. Acomodo sus manos en mi trasero y oprimió levemente en el para subirme a su escritorio. Abrí mis piernas y deje que su cuerpo se posicionara entre ellas. Puso una mano detrás de mi cuello y me hecho la cara para afrente y así pudo apropiarse de mi boca en un beso voraz, sediento y apasionado.

No era lo correcto, Edward estaba casado y yo era su estudiante, pero era lo que nuestros cuerpos querían, era lo prohibido, una tentación que no podía ser rechazada. Y nos encantaba, era lo que nos alimentaba a soportar el aburrimiento con la promesa de que siempre nos encontraríamos, que siempre estaríamos aquí el uno para el otro. Me encantaba dejarle mordidas, mi aroma, mis besos gravados en su memoria, adoraba saber que mientras hacia suya a su mujer era en mi en quien pensaba, el no me lo había dicho, pero yo sabia que cada vez que acababa nuestro tiempo el se ponía triste, por que tenia dejarme… porque yo era su amante.

Nos desprendimos a medias quitando lo que nos estorbaba, los lápices, el papeleo, coloco su lap en un pupitre, después me miro con concupiscencia y se aventó hacia mis labios en los cuales se removió desmesuradamente. Yo no me quede atrás y le bese con toda la fogosidad que había estado guardando desde hace dos días solo para el. Una oleada loca de libídine recorrió mi anatomía haciendo que gimiera contra sus labios, su aliento agitado rozo mis labios entreabiertos en busca de aire, sus aliento era dulce, caliente, provocador… ahí perdí la circunspección y el albedrío sobre mi cuerpo.

Mi cuerpo se movía solo siguiendo sus instintos, mi mente estaba desconcentrada percibiendo las sensaciones de su cuerpo junto al mío y mi anatomía se encargaba de moverse y restregarse contra su cuerpo estrujando su camisa blanca y lisa. Cuando quite su camisa mis dedos manosearon vigorosamente su pecho apolíneo, suave y raso reteniendo su textura entre mis dedos dejándome un cosquilleo titilante. Sus manos apiñaban mis pechos por encima de la tela del sujetador, los tocaba y ahora su boca se desencajo de mi boca e iba a bajar a ese punto.

Beso el borde de mi brasier y luego sobre el, ya quería que me lo quitara y lamiera mis pezones erguidos por sus caricias ya recibidas. Me arquee un poco y una mano bajo por mis costados, por mi vientre y después llego a mis muslos. Los acaricio, curvaba sus dedos enterrándolos un poco en mi piel, me hizo estremecer bajo su cuerpo y sentí su boca sonreír contra mi sujetador. Sus manos tocaron mis bragas levemente y mi respiración incremento desordenadamente.

_Quitalas…_ gemí contra su piel en un tono vergonzoso, que para el de seguro era música para sus oídos. Mis mejillas ardieron en vergüenza, ya estaba humedecida y se notaba a través de las bragas. Poco a poco bajo mis bragas por mis piernas con a la vez que su boca rodaba hacia abajo por mi cuerpo.

Comenzó a besar mis piernas suavemente con los labios entreabiertos haciendo pequeñas aspiraciones dejándome su humedad palpada en mi cuerpo. Cada vez que su boca subía por mis piernas mis palpitaciones eran exageradas diría yo, aumentaron cuando llego a mi muslo entre esos besos tan exquisitos solté un gemido pues ya sabia lo que me esperaba y casi no podía aguantar. Se acercaba a mi centro y yo arqueaba mi cuerpo esperando su roce. Y llego…. Su lengua rozo suave y mórbidamente los pliegues de mi centro y yo solté un gemido mortecino pues no quedaba suficiente aire en mi garganta.

Apreté mis manos al borde de su escritorio cuando su lengua empezó a comprimir contra mi clítoris. Empecé a jadear mientras sentía todo tipo de corrientes eléctricas recorriendo mi cuerpo pero especialmente en mi centro, me empecé a contraer y tuve que entre abrir mis labios para poder respirar y que la molicie se apoderara de mi cuerpo, aunque creo que era imposible en estas circunstancias.

_Edward…ohh, ¡diablos!...mmm…_jadee entrecortadamente mientras que una fuerte contracción de placer se acomodaba en mi centro, no resistí más y tuve que gritar con el poco aire que quedaba en mis pulmones. Me arrepentí cuando su boca no estuvo en mi entrepierna totalmente y sus manos cubrieron mi boca, sabia que no podía vociferar como se sentía el placer puesto que estábamos en su salón pero esto era demasiado. Asentí lentamente para que Edward dejara de cubrir mi boca con sus manos cuando mis músculos se relajaron un poco. Sus labios llenos de mi humedad besaron mi boca con fervor y me hicieron llegar al arrobamiento deliciosamente al compás de sus besos.

Entre besos se acerco más y por la protuberancia de su pantalón sabia que su miembro estaba duro y listo, choco contra mi centro, le lance una mirada coqueta y mis manos empezaron a quitar el cierre de su pantalón inocentemente. Que mas da, cuando te resignas a sexo apurado solo tienes que asegurarte de divertirte, dar y recibir placer, venirse juntos hasta el clímax mas grato y placido. Bajo sus pantalones y yo empecé a toquetear su miembro, manoseándolo, excitándolo, incitándolo, tentándolo, sentía como se endurecía en mis manos y solo podía imaginármelo dentro de mí… Se hizo un silencio torturador, el se mordía los labios para no gemir ni gritar, pude escuchar el tic-toc del reloj, me puso nerviosa. Nos quedaba poco tiempo…Le hice una seña para que mirara el reloj y entendió eficazmente mis intenciones.

Me tomo por las pantorrillas sensualmente, separo mis piernas más y se posiciono en mi entrada. Entro en mi con una fuerte estocada que me hizo volver a mi postura anterior, con mis manos amarradas al borde del escritorio para poder sostenerme, apretar algo, me liberaba un poco de la ansiedad. Arquee mi espalda y entro mas profundo en mi, respire con mi nariz y apreté los labios fuertemente para que no saliera ningún grito o gemido. Con su miembro adentro abrí mis piernas más y rodee sus caderas con ellas para que estuviese más cómodo y empezó a embestirme.

Su ritmo era lento y placentero, queriendo apretar algo más que un simple escritorio me aferre a su espalda poniendo mis dedos en ella, apretando mis dedos contra su piel con cada estocada llena de fuerza, dureza y firmeza. El aire se acumulaba en mi pecho y no quería salir del, el ardor que sentía en mi centro se empezaba a anudar en un lazo estrecho que se cerraba y no se podía soltar, mis músculos se tensaron un poco y sentí mis piernas débiles. Mi sujetador estaba puesto aun, lo bajo hasta mi vientre con su boca sin quitar el cierre.

Su lengua se enredo en mi pezón excitado, enterré mis dedos mas en su espalda y solté un gemido. Mi espalda se arqueaba mas sin proponérmelo y el nudo de ardor y placer se hacia mas grande. Cubrió mi pezón con su boca y empezó a succionar.

_Mmm…ohhh…Edward yo _ gemí intermitentemente. Dios, no encontraba forma de decirle que parara por que si seguía a si iba a explotar en un orgasmo que iba a quitar todas las dudas de que diablos estábamos haciendo aquí, no quería que parara, pero la tensión cada vez era mas fuerte y me empezaba a contraer mas y mas. Mis pechos crecían preparando la llegada de un orgasmo…pero…. No podía mas, dios, ese nudo se hacia mas grande, era placentero, rico, delicioso, pero daba la sensación de poder mas y de dolor, los espasmos cubren mi cuerpo, mi pecho se ruboriza al igual que mi cara, noto como la respiración de Edward se agita mas y mas.

Ya se me hace difícil respirar por la nariz por lo que respiro por la boca haciendo un ruido escandaloso. Constreñí su espalda con mis manos y lo pegue mas a mí, eso ocasiono que con esa embestida llegara al fondo de mi puerto y yo lo acompañe con un grito que ni Edward ni yo lo pudimos parar. Las palpitaciones reventaron e iban tan rápidas que sentía punzadas. Sentí un hormigueo en mi centro y el nudo se contrajo drásticamente más y más. Vislumbre la cúspide del placer cuando ese nudo que tanto me estuvo excitando, desesperando e impacientando se contrajo mas y mas enviando punzadas placenteras por todo mi cuerpo.

_Bella…- susurro mi nombre mientras que con su lengua traviesa lamía mi pezón endurecido por sus caricias lingüísticas, excitantes y hasta un gran porcinito jodidamente eróticas.

Me corrí y cada contracción de placer era mas intensa, mordí su hombro intentando no gritar, su miembro bombeando en mi me dio a entender que el también se había corrido junto a mi. Sonreímos al unísono y empezamos a jadear. Nuestros gemidos se mezclaban creando una armonía sinfónica, que prendía y que abastecía los sentidos. El roce de nuestras pieles quemaba, era un fuego que encantaba y torturaba a la vez por que sabíamos que no nos podíamos quedar amándonos eternamente, teníamos una vida y muy separada. Me penetro por última vez alzándome un poco y llenándome del placer mas sublime y me recosté un poco sobre el escritorio.

Observe su cuerpo sudado y sentí como el mío lo estaba, dios, fue…. Asombroso. Podía sentir el espasmo por todo mi cuerpo aun, la sensación de tenerlo en mí. Respire y me baje de su escritorio con una sonrisa de satisfacción, iba a besar sus labios pero el timbre sonó apurándonos. Nos vestimos torpemente y entre risas, aunque con nuestra mirada triste, nos alejábamos, nuestro tiempo se había acabado. Me peine, me acomode la ropa y me retoque el pintalabios rojo, decepcionada me di cuenta que todo volvía a ser como antes; yo Isabella, su alumna, él Edward, mi profesor. Tome mi mochila y Sali del salón resignada, recordándome que eso era lo único que podía tener con el: sexo apurado con mucha pasión, peligro y adrenalina... Y realmente, no me quejaba ni me importaba.


Hola! Una peque aclaracion, este OS orginalmente estaba escrito como Edward x Irene, pero lo cambie porque se me hacia dificil encontrar una portada o hacerla con ellos dos. Por fa! comenten! y si no es mucho pedir, pasen por este blog por el blog de Neny W. Cullen y participen en su concurso! (http://relatoscullenlovesswan.blogspot.com/) Espero que les haya gustado el Oneshoot♥

7 comentarios:

  1. MUY BUENO, ME ENCANTÓ!!!!!!!! :)

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  2. Ya perdi la cuenta de las veces que e leido este os, de las veces que e fantaseado con el, y es que me acompaña desde hace ya bastantes meses y me hace cada vez que disfruto de el, volver a la fantasia de tenre a mi Edward conmigo, ajajjjjaja
    Cariño, te lo he dicho tantas veces que provablemente canse, pero te lo digo ahora, esta perfecto, porque eres uinica e inigualable, y como siempre te digo "sublime"
    Leerle con la protagonista Bella, no ha hecho que me guste menos, porque en mi mente se que la que estaba ahi con el era yo, ajajajajjaj
    Un beso mi amor y siempre te lo repito pero es que no lo puedo evitar
    Te quiero mi Michelle, te quiero mucho cariño, mi niña hermosa, y gracias por ser parte de mi vida

    Irene Comendador

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  3. me encanta!!!! facinante!!! espectacular!!!

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  4. Impresionante la forma tan espectacular de subir al temperatura en una sala!!!!
    Fantástico!!!!
    Besazos y... yo también quiero más.

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  5. Awww, tu y tu palabra sublime, ya amo esa palabra ajjaajjaja graxias y sabes que te kiero muchooo!!! Beth, wow, que comentario tan lindo!! me emocione jajaja!! Y a Anonimas graxiasss x comentar *_* me alegra mucho ♥

    besitos, las kiero, graxias!

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  6. hay diossssssss.-!! me encantooo sisisi no puede ser q sea tan adicta a estos lemmon!!!!!!

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  7. Awww, graxias Diana por tu apoyo en cada comentario que me mandas, eres super cute♥

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Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...