miércoles, 6 de enero de 2010

Amistad Placentera "Cap 04" - Kokoro Black

Adaptado en la novela de Mauren Child: Placer sin compromiso. Todos los personajes y nombres le pertenecen a Stephenie Meyer, aunque en las noches Jacob es mío, en el día Edward, y también me presta a Ian, a Jared y a Gabe… para los fines de semana… hahaha


--

Amistad Placentera

Capítulo IV – Deseo inesperado.

--


--

Jasper POV

--

El viaje al hotel fue bastante silencioso. Preferí guardarme mis pensamientos, lo cual resultó oportuno porque eran tan oscuros que habrían provocado nubes de tormenta en el interior de la limusina.

Alice estaba sentada a mi lado, pero tan lejos que parecíamos ir en coches diferentes. Podía notar su tensión, aunque no hice nada para tranquilizarla. Al fin y al cabo, se merecía eso y más. No viajábamos a México ni nos disponíamos a limpiar su pasado por capricho mío. Era consecuencia de los errores que Alice había cometido.

Cerré los ojos y volví a pensar en lo que pasaría si la prensa llegaba a enterarse. El apellido Cullen saldría tan mal parado como mis sueños de llevar la empresa al resto del país y del mundo.

Simplemente, no podía permitirlo.

Había trabajado demasiado y demasiado duro para permitir que un Canadiense avaricioso lo echara todo por tierra.

Eché un vistazo a la mujer que estaba a mi lado y noté que estaba contemplando el paisaje por la ventanilla como si fuera una niña en el circo, disfrutando de todo a pesar de su evidente ansiedad.

Las calles de Cancún quedaban atrás en un borrón de colores, oscurecido por el tono oscuro de los cristales ahumados. Pero yo no necesitaba mirar para saber en dónde estaba. Ya conocía aquel lugar. Había estado tantas veces que no me llamaba la atención.

Recordé las palabras que había dicho unos minutos antes y el gesto de dolor de su mirada. Sin embargo, no le pedí perdón. Solo había dicho la verdad al confesarle que no sabía si podía creer en ella. Resultaba bastante sospechoso que se hubiera prestado a casarse conmigo por dinero y que el día de la boda pareciera su supuesto ex marido para decir que seguían casados.

Pero no tenía sentido, era ilógico. El acuerdo al que habíamos llegado era muy beneficioso para ella. Al final se llevaría mucho más que los cien mil dólares que le había pagado a James.

Arriesgarse a perder su boutique era absurdo.

-Es un lugar precioso –dijo ella de repente.

- Supongo que sí.

No dije nada más, y Alice se giró hacia mí con gesto de desesperación.

-Jasper, no soy tu enemigo.

-Eso todavía tenemos que averiguarlo, ¿no te parece?

-Sí, está visto que sí –respondió, cruzándose de brazos-. Pero yo no te he mentido nunca, en toda mi vida.

-Ya.

-Es cierto, maldita sea... Nos conocemos desde niños sabes que es cierto. ¿De verdad crees que te he tendido una trampa con James?

Intenté apartar la vista de las piernas de Alice. Estaba tan nerviosa que las cruzaba y descruzaba constantemente, lo cual no contribuía demasiado a mi paz mental.

-No nos conocemos. Nos conocíamos, que es distinto –puntualicé.

-No consigo quitarme una idea de la cabeza… en el fondo, deseas que te haya traicionado con James. Es ridículo que creas las mentiras de un hombre al que acabas de conocer y en cambio dudes de mi palabra.

-¿Por qué iba a mentir tu amigo?

-Vamos, Jasper… es un delincuente.

-Precisamente por eso. No gana nada mintiendo. Se habría salido con la suya de todas formas –afirmé, mirándola con ira.

-Porque es un canalla y quería sacarme de quicio a mí y ponerte furioso a ti.

Alice cruzó los brazos por debajo de los senos, que de repente ascendieron varios centímetros, y aparté la mirada de sus piernas y la dirigí al generoso escote. Fue tan evidente que ella se sintió incomoda y volvió a cambiar de posición.

-No lo sé. Dudo que se hubiera tomando tantas molestias.

-¿Tantas molestias? Pero si no le ha costado nada… le han bastado un par de insinuaciones para convertirte en un grosero.

-¿Te atreves a llamarme grosero? Yo diría que he sido bastante educado, teniendo en cuenta las circunstancias –afirmé con energía-. Al fin y al cabo estamos aquí, en México… intentando casarnos otra vez y volver a nuestro acuerdo anterior.

-Eso es verdad. Y debo decir que hasta ahora has sido un compañero de viaje excelente –ironizó ella.

No podía creerlo. Con todos los problemas que teníamos, a Alice no se le ocurría otra cosa que protestar por mi actitud distante durante el viaje. Era verdaderamente absurdo.

Pero la pequeña discusión terminó pocos minutos después, cuando la limusina entró en el vado del hotel castillo de los Cullen, un establecimiento que pertenecía a mi familia y que en consecuencia podría ofrecernos la discreción que necesitábamos.

Era un edificio enorme, que ocupaba toda una manzana. La fachada, llena de balcones y de color rosa pálido, parecía brillar bajo el sol de la tarde. Tenía más de cien años y originalmente había pertenecido a un hombre de negocios de Estados Unidos que lo usaba como residencia. Los Cullen lo habíamos adquirido unas décadas después y lo habíamos convertido en hotel. Pero su fama era relativamente reciente; los ricos y famosos no lo habían descubierto hasta unos años antes.

A mí siempre me había gustado. Y como mi primo Peter era el dueño y gerente, tenía la costumbre de pasar las vacaciones en él.

Los turistas que llenaban el cruce se apartaron al paso del vehículo. ¿Qué pensaría Alice al ver el hotel por primera vez? Me recordó a mi mismo en esa misma situación. El jardín delantero era norme, con una fuente circular en el vado y flores tropicales de todos los colores inimaginables. En la entrada del establecimiento esperaba un portero, vestido totalmente de blanco, que se encargaba de recibir a los visitantes.

Casi pude sentir los objetivos de los paparazzi que estaban en la acera esperando sacar alguna fotografía nuestra, pero los guardias de seguridad los habían obligado a permanecer fuera. Ese era uno de los motivos por los que el Castillo de los Cullen era tan popular entre los ricos y poderosos; la dirección sabia proteger a sus clientes.

La limusina se detuvo. Antes de que pudiera salir, un mozo se acercó y abrió la portezuela del lado de Alice. Ella salió y echó una mirada de admiración a si alrededor.

En sus ojos había un brillo de asombro, como el de un niño que viera por primera vez un parque de atracciones. Pensé que los paparazzi conseguirían unos planos excelentes desde la calle. Pero eso no tenía importancia; a no ser que a algún periodista se le ocurriera investigar el pasado de Alice y descubriera la verdad.

-Me alegro de tenerlo otra vez con nosotros, señor Cullen –dijo el portero, de cabello blanco, tez morena y ojos negros.

Asentí. Iba con tanta frecuencia al lugar que conocía personalmente a todos los empleados.

-Yo también me alegro de verlo, Harry. ¿Está mi primo?

Solo lo pregunté por preguntar, porque sabía que Peter estaría en el hotel. Solo había asistido a la ceremonia por el compromiso, pero se había regresado en cuanto había finalizado. Había dicho que tenía algunos pendientes. Casi nunca lo dejaba desde que lo había convertido en uno de los centros vacacionales más deseados del mundo.

-Sí, ¿Quiere que lo llame? Llego una hora antes que ustedes. Pero estoy seguro que los recibirá.

-No, no es necesario. Pero gracias de todas formas.

Ya iría a ver a Peter cuando Alice y yo hubiésemos dejado el equipaje en uno de los áticos que reservábamos para la familia.

-Hola –nos interrumpió ella de repente-. Soy Alice… Cullen.

Alice le ofreció la mano y el portero se la estrechó con cierta sorpresa, como si no esperar a que se presentara a él.

Fruncí el ceño y ella me miró con intensidad, queriendo dejar bien claro que no pensaba esconderse ni permanecer al margen. Por desgracia, Alice no parecía haber reparado en los fotógrafos de la calle. Alguno de ellos habría sacado una instantánea en la que no apareceríamos con expresión de ser precisamente felices.

La tomé del codo, asentí al portero y entré en el hotel. Era mejor que nos alejáramos del peligro cuanto antes.

-¿No te parece que ha sido una forma algo brusca de entrar? –preguntó ella molesta.

-No suelo presentar a mis acompañantes al portero –respondí.

-Dios mío, eres todo un mojigato…

-No soy ningún mojigato –susurré, irritado-. Harry tiene su trabajo y sabe que entre sus obligaciones no está la de hacerse amigo de los clientes.

-No pretendía invitarlo a comer –dijo con ironía-. Me he limitado a presentarme… No tiene sentido que guarde mi identidad en secreto. A no ser claro está, que sientas vergüenza de mí…

-De lo único que siento vergüenza es de estar casado con una bígama. Lo demás me da exactamente lo mismo –afirmó.

Ella entrecerró los ojos y apretó los dientes.

-Eso no es culpa mía.

-Ya. No dejas de repetirlo.

Eché un vistazo a mí alrededor y vi que algunas personas nos estaban mirando, así que bajé la voz un poco más.

-Te agradecería que actuaras con discreción y cautela hasta que hayamos solventado nuestro pequeño problema.

-¿Con discreción? Ah, comprendo… supongo que venir al hotel en una limosina gigante es actuar con discreción –contraatacó.

Suspiré y la miré. Sus ojos verdes brillaban de ira y su boca estaba tan tensa como alta y desafiante su barbilla. Tenía las mejillas levemente ruborizadas. Y sus senos se apretaban con fuerza contra el escote y la tela del vestido, a juego con sus ojos.

La encontré tan atractiva y deliciosa que me excité de inmediato.

-Mira, Alice… -dije, forzando una sonrisa para que la gente no sospechara-. No nos conviene llamar la atención demasiado. Hagamos lo que tenemos que hacer y ya está.

-Me parece bien. Yo solo digo que no voy a permanecer al margen.

-De acuerdo, tienes razón.

-Gracias.

Los labios de Alice se curvaron hacia arriba en una sonrisa realmente sensual. Pero en sus ojos no había ningún calor.

Murmuré una maldición por haberme casado con una mujer impresionante a la que ni siquiera podría hacerle el amor. Después, la tomé del brazo y caminamos hacia el mostrador de recepción. Una joven de cabello oscuro se acercó y sonrió.

-Señor Cullen…

La joven pronunció mi nombre con un tono tan felino que pareció un ronroneo. Alice se puso tensa.

-Bienvenido al hotel Castillo –continuó, sin dedicar una sola mirada a Alice-. Como nos pidió, hemos preparado la suite para usted y para su…acompañante.

-Gracias, María.

Fui educado, pero mantuve las distancias con la coqueta joven. No era ningún idiota. Las malas artes de María podrían haber funcionado con otro hombre, pero yo era totalmente inmune; sabía que muchas mujeres se sentían atraídas por el poder y por el dinero y estaba acostumbrado a ese tipo de situaciones. La mejor reacción era hacerse el tonto.

Alice se inclinó hacia mí y susurró:

-¿Es que conoces a todo el mundo?

Me incliné sobre ella y susurré a su vez:

-Lleva el nombre en la placa de la blusa.

-Ah…

-¿Desea que le reservemos una mesa en el restaurante? –preguntó la recepcionista.

-No, gracias –contesté.

-Y su acompañante… ¿va a quedarse con nosotros durante toda su visita?

-¿Cómo?

-Sí, voy a quedarme –intervino Alice, mirando a la joven con frialdad-. Nos quedaremos juntos. Es lo más lógico, teniendo en cuenta que yo no soy su acompañante sino… su esposa.

-Comprendo.

La joven comprobó los detalles de las reservas y sonreí para mis adentros. Había algo terriblemente atractivo en el espectáculo de contemplar a Alice mientras defendía su territorio frente a otra mujer. Y por otra parte, me alegraba observar que sabía cuidar sus intereses.

-En cuanto a la mesa del restaurante –continuó Alice-. Descuide: no necesitaremos de sus servicios.

-Por supuesto, señora…

La joven apartó la mirada de los ojos verdes de Alice. Y como está ya había ganado la partida, se permitió el lujo de cambiar de tono de voz y hablar con mas dulzura.

-Y ahora, si no le importa, estamos de luna de miel y nos gustaría subir a la suite.

Alice se volvió a acercar y me acarició el pecho por encima de la camisa.

Mi humor se desapareció de repente y se convirtió en deseo. Sabía que Alice solo estaba disimulando delante de María, pero no pude evitarlo. Me había excitado tanto que iba a tener problemas para disimular la erección cuando camináramos a los ascensores.

La miré a los ojos y supe que era consciente del efecto que causaba en mí. Pero lejos de cambiar su actitud, se pasó la lengua por los labios.

Alice suspiró, volvió a mirar a la recepcionista y dijo:

-Estoy segura de que comprende nuestra situación. Estamos deseando quedarnos a solas…

-Sí, si, por supuesto –dijo la joven, nerviosa.

Cuando recibí las llaves de la suite, un pensamiento cruzó por mi cabeza… Alice se equivocaba si creía que podía tomarme el pelo de esa forma y salir indemne. Yo también podría jugar ese juego.

La tomé entre mis brazos y la besé apasionadamente.

El contacto empeoró la situación de mi entrepierna, pero dejé a Alice asombrada y sin habla.

Había conseguido mi objetivo.

-Muchas gracias, María –dije.

Acto seguido, tomé a Alice de la mano y la llevé a los ascensores.


--

Alice POV

--

Todavía estaba boquiabierta una hora después.

Era como si aun sintiera el roce de sus labios. Y no salía de mi asombro. Porque era verdad que me había excedido en el intento de dar una lección a la recepcionista y que había ido demasiado lejos al coquetear con él. Relamerme y acariciarle el pecho a Jasper había sido como agitar un filete delante de un león. Incluso comprendía que, como respuesta, él hubiera decidido besarme. Pero no esperaba excitarme con un roce leve y rápido de sus labios.

¿Él también habría sentido la descarga de electricidad?

No, probablemente él no había sentido nada, esto era solo un juego.

Y por lo visto, Jasper era un gran jugador.

Intenté concentrarme en sacar la ropa de las maletas y guardarla. Pero cuando terminé, volví a quedarme a solas con mis pensamientos. Y si mi cuerpo había reaccionado de tal forma a sus besos, tenía un buen problema.

Salí de la habitación que había ocupado, la más pequeña de las dos de la suite, y me dirigí al salón. La vista era impresionante. Era una sala larga y enorme, decorada con muy buen gusto. Cuatro sofás blancos, de piel, formaban un círculo alrededor de una chimenea instalada en el centro. De una de las paredes colgaba una pantalla de televisión. En el extremo contrario había un bar tan grande como todo lo demás, y las paredes, de tono amarillo claro, estaban decoradas con cuadros. Todo, desde las alfombras persas al balcón que se abría a la terraza, y radiaba elegancia.

Jasper estaba sentado en la terraza, de espaldas al salón de la suite… y a mí. Lo miré de arriba abajo e intenté eliminar la atracción que sentía por él, pero no era fácil. Se había quitado la chaqueta y la corbata y ahora solo llevaba los pantalones y la camisa. La brisa del exterior le revolvió el cabello cuando alcanzó una botella de champan, metida en lo que parecía ser un cubetita de plata y llenó dos copas.

Tomé aliento y avancé. El sonido de mis tacones era lo único que se podía oír.

Al salir a la terraza, noté que hacia fresco y la carne se me puso de gallina. Pero en lugar de prestarle atención a la temperatura, me concentré en las luces de la ciudad y en el cielo que se oscurecía poco a poco.

-¿Ya has terminado? –pregunto él.

-Sí.

Acepté la copa que él me ofreció y probé el champán. Todavía estaba bajo los efectos de las margaritas que me había tomado en el avión y pensé que lo más sensato sería que comiera algo; pero al mirar la comida que había encargado Jasper para picotear un poco, supe que no podría llevarme nada al estomago.

-Es un lugar precioso.

-Sí, lo es.

-Supongo que vienes muy a menudo…

Él se encogió de hombros.

-El hotel es de la familia. Todos venimos a menudo.

-Comprendo… Y también supongo que no sueles venir solo.

Jasper se giró para mirarme y arqueó una ceja. El viento que le revolvía el cabello le daba un aspecto más vulnerable.

-¿Es que estas celosa?

-No, ni mucho menos –se defendió-. Eso sería una tontería, ¿no te parece? No es como si tú y yo estuviéramos realmente…

-¿Enamorados? –preguntó él.

La sonrisa de Jasper despareció de inmediato.

-No, no es como si estuviéramos enamorados –continuó-. Ni casados. Y precisamente hemos venido a México por eso… Mañana hablaré con mi primo Peter y le preguntaré con quien tenemos que hablar para arreglar lo del divorcio.

-Muy bien.

Me apoyé en la barandilla de hierro forjado y apoyé la copa en la fría superficie. Cuando volví a beber, supe que el champán se me estaba subiendo a la cabeza. Pero quizás era lo mejor.

-Eres una gran actriz, no hay duda –dijo él.

-¿Cómo?

-Lo digo por el espectáculo que has dado en recepción. Hasta yo he llegado a creer que somos una feliz pareja de recién casados…

-Sí, bueno… es que esa chica me ha sacado de mis casillas.

Jasper me rellenó la copa.

-Ya me había dado cuenta.

-Y lo has disfrutado, claro…

Tome otro sorbito.

-Sí, no lo puedo negar. Pero eso me ha hecho pensar.

Jasper se bebió su copa de un solo trago y la llenó otra vez.

-¿En qué? –pregunté.

Empezaba a sentir los efectos del alcohol.

Sin embargo, era una sensación tan agradable que no me preocupó en absoluto.

-En que si eres tan buena actriz has podido engañarme todo el tiempo.

Solté un suspiro de frustración. Jasper seguía convencido de que James había actuado en connivencia conmigo.

-Ya te he dicho que no tengo nada que ver con ese asunto.

-Me gustaría créete, de verdad –dijo, extendiendo una mano para juguetear con mi vestido-. Pero…

-¿Pero?

Al parecer, nuestras mentes y nuestros cuerpos iban en direcciones opuestas. Aunque él pensaba que lo había traicionado, me deseaba. Y a pesar de que me creía capaz de participar en una extorción, yo lo deseaba a él.

Mi piel se calentó en cuanto sentí su contacto. Fue una sensación tan intensa que supe que me había buscado un buen problema. Pero en ese momento… me daba igual.

-Necesito algo más convincente que una afirmación. –afirmó él, mirándome con deseo.

-No sé que mi puedo decir…

-No digas nada.

-¿Entonces?

Jasper dejó la copa en la mesa, se levantó, me bajó una de las tiras del vestido y me acarició el hombro con el pulgar. Me estremecí y contuve la respiración.

-Hoy he pagado cien mil dólares por casarme contigo… -dijo mientras me besaba el hombro.

-¿Y?

La mano de Jasper descendió suavemente hacia mi escote.

-¿Qué vas a enseñarme a cambio de lo que he pagado?


¿Cómo la ven? Jasper quiere recuperar un tanto de lo que gasto en Alice… jojo. Saben lo que viene al próximo… las amo mucho. Feliz día de reyes… Y FELIZ CUMPLE TINI.

¿Aullidos para esta lobita Alpha?

29 comentarios:

  1. WIIIII
    La primera, por fin, ahi este Jasper me encanta, todo duro el pero sigue siendo hombre
    jajajaja
    PAGA, PAGA
    Gracias por el capitulo
    Hermosa
    Te amo

    Jazzy

    ResponderEliminar
  2. Genial Koko, como siempre..!!! me encanta esta historia...Esperando el proximo capitulo... Saludos..!!!

    Montse :*

    ResponderEliminar
  3. jijiji cada vez me gusta mas Jasper.es tan...hombre...mmm que bonita forma de compensar lo pagado. jasper lo sabe, pobrecita Alice, me da rabia que no confíe en ella.

    un besazo Koko

    ResponderEliminar
  4. AAAAAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUUUUUUU
    completamente sensacional!!
    kakajkakja cuantas maneras tienes de sorprendernos!
    lkkakjaka estare esperando el rpoximo!!

    ResponderEliminar
  5. KOKOOOOO!! POR FAVOR! QUE NO SE ACUESTE CON EL! ES UN MANIPULADOR SI PIENSA QUE POR PAGAR TANTO PUEDE LLEVARSELA A LA CAMA! NOOOOO!!QUE LE DIGA LO QUE SIENTE Y DESPUES YA VERA! ALICE DEBE DE SER UNA MUJER CON DOS PARES DE PIIIIIIII!!JAJAJAJA! COMO CAIGA EN EL SACO VA A QUEDAR COMO UNA CUALQUIERA!
    ME ENCANTA ESTE FIC! GRACIAAAS!

    ResponderEliminar
  6. Wow! Wow! Wow! Me encanta esta pareja y adoro el fic! Espero el siguiente capítulo!
    Un beso
    T.

    ResponderEliminar
  7. oooooooooooooooooooooooooo alabo y venero tu forma de escribir enserio mis reverencias para ti XD aaaangrr por qe nos dejas en suspensoo o sii mas qe un aullidooo te mereces :D bueno espero continues pronto el ficc o si apoyo al coment de arriba (pero yo qiero a edward)te regalo a jacob con moñito y toda la cosa te lo ganastee oo siii
    bueno me voy kisses bye

    ResponderEliminar
  8. AUUUUUUUUUUUUU!!!!!!!!
    ME ENCNATO.

    ResponderEliminar
  9. G-low Koko; Ps aquii paso Wiii New capii luego comentoo va ? ILY nna !!!

    ResponderEliminar
  10. bueno ke fiera se vio alice
    pero la verdad lo ke dijo jasper al final como ke no me paracio mucho
    es como si la hubiera comprado para ......you now
    eso no me gusto mucho
    pero espero con ansias el siguiente cap
    tkm
    nunca me desepcionas
    espero ke te ayan traido todo lo ke pediste
    chao
    bye

    ResponderEliminar
  11. :OO OMG !!! nna Waaa me dejastte sin habla :OO
    Qierooo saber mas )): Eres mala Koko ¬¬ Hahahah no te creas eres un Genio Waaa ! comos e la
    aplico Alice a Maria Yea fue la ley & cmo Jasper
    la sorprendio con el Beso; cortoo pro tiene su
    historia & los celos & T O D O !!! eres la Ley
    amiga !!! Jasper es un pervertido celoso & Alice
    ps... no lo se pro aun asee me gusta !!!! Hahaha
    te amoo nna ! Xau ((KK))

    ResponderEliminar
  12. Mi querida Alpha un dia de estos vas ahcer que me de un ataque al corazon con todos tus escritooos asi no se puede... jajajaa
    me encanta como va esta historia y ojala mi bella Alice tome el control .. dudar de ella por Dios no hay justicia
    AAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU!!!

    ResponderEliminar
  13. me dejaste con ganas de mas
    no es justo
    jaja
    ta re bueno el cap
    bueno esperare ya que ja
    bye

    ResponderEliminar
  14. WOWWWWWWWWWWW!!!
    ke cap mas intenso xD...
    me gustan como son ellos, sabes se me imaginan muy pasionales y de contacto...reaccionan solo con miradas y simples contactos jakjakaj estos van a hacer combustion expontanea siempre jiji... eso me ENCANTAAA!!

    bueno mi kokisss espero ke estes de lo mejor, y ojala te pases por brandon cullen porke publike otro ONE SHOOT xD... ahi para ke tengas algo de lectura jijij

    bsotes enormesss hermosaaaa!!! xD

    ResponderEliminar
  15. hahaahaah me encanto espero que alice no responda mal
    kokoro emdejastecon las ganas de leer que seguia despues y dejarcon gans a una mega fanaica de los lemmons no es bueno me tendre que ir a dar una pequeña duxa con agua tibia jajajaja...
    vueno me boy cuidate por que no e gustaria que te lastimaras y dañaras tu hermoa cabezita tan creativa que adoro
    TEAM EDWARD

    ResponderEliminar
  16. Cada vez mejor mi Koko.
    Se palpa el deseo, los celos, el amor emergiendo cual sirena del agua. Besotes

    ResponderEliminar
  17. Christine_Cullen (L)7 de enero de 2010, 12:08

    AAAAAUUUUUUU!!!!
    por favooorrr
    que pague, que pague!!
    los dos lo estan deseando!!!
    ademas tengo una teoria sobre este fic que puede que se de a la luz en breve *O*
    y tambn espero que Alice y Bella se hagan superamigas, asi tambien sabremos como van los otros dos XD
    y tambn supongo que luego vendra Emmett XD

    Koko en serio eres la mejorrr
    me encanta todo lo que escribes

    besotes desde Alicante, España

    ResponderEliminar
  18. hola!!! para cuando la proxima parte??????????????!!!!!!!!!!!!! quiero seguir leyendo!!! me tiene hechizada :)
    AAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUUU

    ResponderEliminar
  19. KoKo!!!

    Hay ese Jasper muy desconfado pero para nada tonto!
    Alice aprovara esa situación??

    Esos dos stan cayendo tan rapido jajajja

    Gracias KoKo por un capi mas!
    Excelente regalo de reyes!

    xOxO

    ResponderEliminar
  20. AYYYYYYYYYYYYYY!!!!^^^^ k bueno el final nos a dejado pensando en lo k pasaraaaaaa sube la entrada proxima rapidooooo jajjaa espero tu cap.bueno no puedo esperarrrrr kokoro me encantass!!(LLL)

    ResponderEliminar
  21. y si no es muxo pedir koko as k en el proximo cap alla lemmon x favor k nos dejaste cn las ganasss no seasss cruelllll =( jaja de nuevo me encatass!!!

    ResponderEliminar
  22. no lo se
    yo me ofenderia
    pero tambien
    comprendo k no
    se puede pensar
    kon tanta atraccion
    k el me aria sentir
    en fin con el
    corazon y las
    hormonas no ay
    kien pueda
    lindo cap me enkanto
    esp de darle su
    meresido a la resepcionista
    ok m despido ato: nallely

    ResponderEliminar
  23. hay mira a jasper ahora se quiere cobrar el dinero en especie ja,ja
    yo no creo que alice le deje ella tiene mucho caracter
    me gusta mucho esta historia, es buenisima
    besos guapa

    ResponderEliminar
  24. bueno en verdad merece algo a cambio de lo que ha gastado... y ella como tambien tiene deseos deberia pagarle

    siguele pronto que estoy entusiasmada,,, me encanta jasper es tan pero tan bello

    ResponderEliminar
  25. espectacular!!!
    supongo que esta será una trilogía no?

    ResponderEliminar
  26. jajajaja peroo Jasper quiere que le pague en especie? Si, no hay duda. jajajaaa hay Alice... Por Dios yo feliz en pagarle de esa maneraaa :P

    Koko linda, eres la mejorr... de eso no hay dudaa...
    !auuuuuuuuuu!

    ResponderEliminar
  27. Me encantó la actitud de Alice al llegar al hotel. Y yo siendo ella lo mandaría a darse una ducha, por cerdo manipulador, desconfiado y ...
    Creerse que el dinero le da derecho a todo... Pero me imagino que ella no. Claro que quién sabe... Quizá si estuviese en su situación pesasen más "otras cuestiones".
    Sí mejor que le de la lección después, cuando quiera repetir, ahahah

    ResponderEliminar
  28. aaaaaaaaaaaaaaa
    HOMBRES
    MALDITOS HOMBRES
    jajajaja
    quiero a Jasper pero, no me gusta cuando
    los ponen con esa actitud en este
    momento lo odio jejeje
    y que bien por Alice que no se deja de
    Nadie, es su derecho y odio a Jasper
    por no poner en su lugara a la tal
    Maria desde el principio aunque con
    el beso que le dio a Alice lo perdono
    pero solo un poco :P si me da un beso
    haci lo perdono totalmete XD

    Besos

    .......* Gaby Cullen Black *.......

    ResponderEliminar
  29. Alpha mi alpha....Kokoro sin duda eres una prodigio la simple descripcion de Alice me dejado kon la boca un poco humeda....
    sin duda no soy el unico ke desea ver el siguiente cap.

    ResponderEliminar

Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...