viernes, 11 de diciembre de 2009

Reconquistando tu corazón "Cap 08" - Kokoro Black

Disclaimer: Basado en la novela de Catherine Mann: Volveré a seducirte. Todos los personajes y nombres le pertenecen a Stephenie Meyer, aunque en las noches Jacob es mío, en el día Edward, y también me presta a Ian, a Jared y a Gabe… para los fines de semana… hahaha MALDITA MEYER!! PORQUE HACE HOMBRES TAN IRRESISTIBLES!!!


--

Reconquistando tu corazón

Capítulo VIII – No quiero subir el ultimo tramo.

--


--

Edward POV

--

Paseaba por la sala de espera, aun sin saber si Bella y el bebe estaban bien.

Maldita fuera mi suerte.

¿Por qué me había distraído mientras iba conduciendo? Si, había logrado evitar al otro vehículo… por poco. El conductor borracho había chocado contra un poste de teléfono y luego salió del coche sin un solo rasguño. Bella, sin embargo, había quedado inconsciente.

El presente se parecía demasiado al pasado. De nuevo estaba en Urgencias, esperando que me dijeran que Bella y mi hijo estaban bien. Tenía deseos de llevarla al hospital de mi padre, pero estaba hasta el otro lado de la ciudad y no tenía mucho tiempo… ni cabeza. Y, como había ocurrido nueve años antes, terminé conduciendo como loco hasta el hospital más cercano. Tenía suerte de no haberla matado entonces. ¿Pero ahora?

Seguía sin saber nada porque el médico me había echado de la consulta y en el pasillo frente a la sala de espera podía oír los ruidos de urgencias: una señora mayor quejándose cada vez que alguna enfermera se acercaba a ella, un adolescente llorando mientras hablaba por el móvil, las ocasionales carreras por el pasillo cuando los enfermeros entraban con un nuevo paciente…

¿Cuánto tiempo podría esperar sin volverme loco? Paté una mesa y, al hacerlo, me fijé en mis zapatos, los que Bella me había regalado por Navidad. Unos zapatos que deberían estar en el suelo, al lado de la cama, si la noche hubiera terminado de otra manera.

No podía ni pensar en lo que le habría pasado a Jasper. Alguien tenía que darme una buena noticia. Y pronto.

Las puertas de urgencias se abrieron para admitir a varias personas, pero estas mejor vestidas de lo habitual: mi familia. No debían de haber tenido tiempo de cambiarse después de la fiesta. Mi madre corrió hacia mí, Emmett y Rosalie tas ella.

-¿Saben algo de Jasper?

Emmett negó con la cabeza.

-Aun no. Papá está intentando averiguar con sus contactos. Alice está en casa por si llamaba alguien.

Dejé escapar un largo y doloroso suspiro, deseando saber algo más pero agradecido porque, al menos, no habían recibido malas noticias. Aunque mi madre debían de estar sufriendo como nunca, seguía llevando el vestido de noche, pero en los pies llevaba los zapatos del jardín y eso, en una mujer como ella, evidenciaba lo angustiada que debía de estar cuando salió de casa.

-Mamá, no tenías que venir –dije, abrazándola-. Ya tienes suficientes problemas con lo de Jasper.

-Tú eres mi hijo y Bella también es como si lo fuera- me dio un beso en la mejilla, la angustia en sus ojos evidente-. Todos son mis hijos, y todos son igualmente importantes para mí.

-Yo estoy bien. Es solo Bella –y mi hijo, aunque eso no podía decirlo –quien me preocupa.

Mi madre tomó mi brazo.

-Dijiste por teléfono que estabas con Bella, pero no dijiste que le había pasado.

-Se golpeo la cabeza contra el cristal de la ventanilla cuando di un volantazo para evitar a un conductor borracho.

-Hijo, no sé que hay entre ustedes dos últimamente, pero me alegro mucho de que estén juntos.

La mitad del tiempo tampoco yo sabía cómo estaban las cosas entre mi ex mujer y yo.

-Gracias por venir, pero de verdad pueden irse a casa.

Mi madre tomó mi cara entre sus manos.

-Tú más que nadie sabes el miedo que alberga el corazón de un padre.

Por un segundo, pensé que había descubierto el embarazo de Bella, pero enseguida me di cuenta de que se refería a… Claire. Y me quede helado. Nadie más que Bella se atrevía a mencionar ese nombre delante de mí porque interrumpía cualquier conversación sobre el tema cada vez que alguien lo intentaba. Que mi madre lo mencionase ahora solo demostraba lo angustiada que debía de estar.

-Aunque sabes que Claire estará bien cuidada, es difícil no preocuparse por los hijos cuando no están contigo. Y mucho más cuando sabes que no volverás a verlos. Bella y tu han sufrido mucho estos últimos meses…

Mi madre había sugerido muchas veces que no empezáramos con el proceso de divorcio tan rápidamente. Lo cual demostraba lo bien que Bella y yo habíamos escondido nuestros problemas incluso de los más allegados. El final de nuestro matrimonio fue muy doloroso, pero había sido un proceso que empezó dos años antes.

-Edward, ¿me has oído?

-Si, mamá, te he oído –dije, sin saber muy bien lo que decía.

-Mamá, ya has visto con tus propios ojos que está bien –intervino Emmett entonces, tomándola del brazo-. Vamos a casa, Edward nos avisara el estado de Bella.

La puerta que llevaba a las consultas se abrió entonces y me di la vuelta, olvidándome de mi familia por el momento. La doctora Zafrina se acercó, sus gafas colgando del cuello.

-Señor Cullen, Bella esta despierta. Y parece que tanto ella como el bebe están bien.

Tuve que poner una mano en la pared porque me fallaban las piernas.

-¿Cuánto tiempo tengo que esperar antes de entrar a verla?

-Unos minutos. Se está vistiendo para que pueda llevarla de vuelta a casa, pero tendrá que vigilarla durante la noche para asegurarnos de que el golpe en la cabeza no ha provocado una conmoción –la doctora apretó mi brazo-. Es dura su mujer… ella y el bebe.

-Gracias otra vez, doctora. Le agradezco que haya venido.

Los médicos del hospital me habían asegurado que ellos se ocuparían de Bella, pero después de lo que había pasado nueve años antes, había exigido que llamasen a la ginecóloga de mi mujer.

Pero cuando la puerta se cerró tras la doctora, encontré a toda mi familia mirándome con la boca abierta. Incluso papá había llegado a tiempo para escuchar la noticia.

-¿Un bebe? –mi madre fue la primera en hablar.

Y nosotros esperando el momento adecuado para contar que íbamos a tener a un hijo. Al menos Bella no podría echarme la culpa a mí.

-Eso responde a muchas preguntas –Sonrió Emmett-. Como, por ejemplo, porque se llevaban tan bien de repente.

-El día que se desmayó en el juzgado descubrimos que estaba embarazada. Queríamos encontrar el momento adecuado para contárselos… una vez que hubiéramos tenido la oportunidad de hacernos a la idea.

Mi hermano me dio un golpecito en el hombro.

-Enhorabuena.

-Me alegro mucho por los dos –dijo mamá-. Un niño siempre es motivo de felicidad.

Si, desde luego. Pero yo solo quería ver a Bella y… maldita sea, seguía preocupado por mi mejor amigo. ¿Cómo podía haberme olvidado de Jasper?

-Bella y yo iremos a la finca en cuanto…

-Tu tienes que quedarte con tu mujer toda la noche. Te llamaremos en cuanto sepamos algo –interrumpió mi madre.

Vacilé un poco, el deseo de saber algo sobre Jasper luchando contra mi preocupación por Bella.

-¿Estas segura?

-Lo único que podemos hacer es esperar. Ve con ella, hijo.

Tenía razón. No podía ayudar a Jasper, pero si podía cuidar a mi mujer.

-Pasaremos por allí mañana a primera hora. O en cuanto sea posible.

Y cuando hubiera pasado la preocupación de mi madre, pensaba dejar claro que Bella seguía siendo parte de la familia. Si, conseguiría enderezar mi vida.

Nunca podría recuperar a Claire, pero no iba a dejar que nadie me robara de nuevo a mi hijo, ni siquiera la testaruda de mi mujer.


--

Bella POV

--

Apoyé la frente en la fría superficie del cristal, mirando las casas que pasaban a mi lado. Eran las casas de mis vecinos, mi vecindario desde que Edward volvió a la finca de sus padres.

¿Solo habían pasado un par de horas desde que Edward y yo habíamos corrido hacia la casa, esperando ser “amigos con derecho a roce”? Ahora no sabíamos si Jasper estaba vivo o muerto. Nosotros mismos podríamos haber muerto por culpa de un conductor borracho.

La vida tenía por costumbre dar las cartas que le parecía bien. Como mi embarazo adolescente, por ejemplo. Y la trágica pérdida del niño. ¿Las cosas hubieran sido diferentes para mí y para Edward si hubiera insistido en esperar hasta que nos conociéramos un poco mejor?

Cuando Edward detuvo el coche frente a la casa, levanté los ojos con una mano en el abdomen. Las dos personas más importantes del mundo para mi estaban bien.

Debería de alegrarme por eso, pero seguía inquieta. Si, Edward era mucho más que “un amigo con derecho a roce”. Pero ¿Qué había cambiado entre ellos? No era fácil desembarazarse de los sentimientos solo por haber firmado un acuerdo de divorcio.

Aunque no podía resolver nada esa noche con el miedo del accidente atenazándome todavía. Y sin saber cual había sido el destino de Jasper.

Edward abrió la puerta y dio la vuelta al coche para ayudarme a salir. Mientras nos dirigíamos a la casa, no podía dejar de comparar aquel sombrío paseo con el que habíamos dado unas horas antes. Sí, me haría falta el consuelo de sus brazos.

¿Y si él quería retomar lo que habíamos dejado a medias? No sabía si eso sería sensato, pero sabía que tenía que ser sincera con él.

Seth nos recibió en el pasillo, tan alegre como siempre, y lo sujeté por la correa para que no saliera corriendo al jardín.

-No sé si deberíamos acostarnos juntos esta noche.

Edward guardó las llaves en el bolsillo.

-Tienes que descansar. Te despertare cada dos horas.

Se había rendido tan fácilmente que no sabía si sentirme aliviada o insultada.

-Siento que no puedas estar con tu familia en este momento. Debes de estar muy preocupado por Jasper. Yo misma estoy preocupada por él.

Él se inclinó para acariciar la cabecita de Seth.

-Yo no puedo hacer nada por mi cuñado y Emmett ha prometido llamar si tenían alguna noticia. Además, estoy donde debo estar. Mi hijo y tú son mi familia.

La sinceridad de sus palabras me conmovió y removió muchos sentimientos en mí.

-El niño está bien, puedes dejar de preocuparte por eso al menos.

Edward apretó los labios, sacudiendo la cabeza.

-No debería haberte dejado subir al coche. Debería haber insistido en que te quedases aquí…

¿Se sentía culpable por el accidente? Eso era injusto… y una carga tan pesada.

-No ha sido culpa tuya. El otro conductor estaba borracho.

Él me agarró por los hombros, su rostro tenso de dolor.

-Pensé que ibas a morir esta noche, Bella.

Sus palabras eran un eco de las que había pronunciado nueve años antes, cuando desperté después de la operación, el embarazo ectópico rompiendo una de mis trompas.

Y, de repente, me di cuenta de lo mal que Edward debía de haberlo pasado esta noche, reviviendo el pasado. ¿Podría haberse culpado a sí mismo por lo que pasó esa noche también?

-Edward…

No sabía que decir. Pero entonces él selló mis labios con una fiereza, con una urgencia que tocó mi corazón. Cada una de sus caricias tirando las barreras emocionales que yo había intentado levantar para protegerme. La primera y única admisión de miedo por parte de Edward me hacía sentir más débil que el roce aterciopelado de su lengua y, sin pensar, metí la mano bajo su chaqueta para acariciar su torso.

Necesitaba aquella conexión, aunque solo fuera física. Dejando escapar un gemido, le eché los brazos al cuello y nuestras bocas se encontraron con el familiar pero inexplicable frenesí que habíamos empezado a ver como algo inevitable.

Él acariciaba mis pechos por encima de la tela del vestido, la rigidez de las puntas como respuesta… un eco de mi deseo.

Pero entonces se detuvo.

-¿Te parece bien…?

-Estoy bien –dije, desabrochando su camisa-. La doctora Zafrina ha dicho que el niño y yo estamos bien. De hecho, es bueno para mí estar despierta.

-Pero si…

-Estoy bien –repetí entre beso y beso mientras subíamos la escalera, dejando ropa tras nosotros, su chaqueta, mis zapatos…

Edward se detuvo en el rellano, apretándome de nuevo contra la pared. Y yo no quería pensar en el día siguiente ni en el pasado. Lo que quería era hundirme en el deseo que sentía por mi marido.

Y, aparentemente, los sentimientos de Edward no eran muy diferentes porque el ardor con que me besaba hacia que me temblasen las rodillas.

Una sombra blanca llamó mi atención y, al levantar la cabeza, vi su camisa volando por la escalera. ¿Cuándo se la había quitado? Aunque me daba igual mientras pudiese tocarlo.

El vestido se deslizó por mis hombros, de nuevo sin saber cómo. Y, de nuevo, me dio igual mientras fuera él quien lo apartase.

Edward apoyó las dos manos en la pared y se inclinó hacia delante, el cálido aliento masculino enviando escalofríos por mi espina dorsal, para buscar mis labios de nuevo. Enredando los dedos en su pelo, abrí la boca hambrienta, y nuestras lenguas se enredaron en una batalla de voluntades que prometía mucho si ninguno de los dos se rendía.

Pero el último tramo de escaleras me parecía una excursión interminable y me apoyé en él para no caer al…

Si, al suelo. El suelo era perfecto, inmediato. Porque esos últimos escalones que parecían imposibles me darían tiempo para entrar en razón y aparatarme de algo que deseaba, que necesitaba.

Edward me tumbó con cuidado sobre la alfombra.

-¿Ahora? ¿Aquí?

-Si, aquí.

Restregué mis caderas contra él, disfrutando como nunca de esa proximidad. Y Edward, enredando sus piernas con las mías, metió una mano bajo el sostén para acariciar mis hinchados pechos…

-Pensé que no querías sexo esta noche –dijo con voz ronca.

-Y así es –murmuré -. Quiero que hagamos el amor otra vez.

Y si, quería eso aunque sabía que era imposible.

Sus ojos verdes se volvieron de un gris que yo conocía bien. El gris que decía que estaba intentando distanciarse de sus emociones. Emociones que Edward llamaba “dramones” en los meses previos al divorcio. Pero si me daba tiempo para pensar, perderíamos la oportunidad que teníamos esa noche.

-Date prisa –mordiéndome los labios, desabroché su cinturón y lo liberé con lentas y deliberadas caricias.

Edward, con la mano temblando mientras me quitaba el sujetador y las pantaletas, se apoyó en un codo para mirarme. Me miraba con tal admiración que solo una mujer comatosa no podría disfrutarlo.

Comatosa. La palabra me hizo recordar ese momento terrible en el coche, los primeros segundos cuando desperté en el hospital. Todo ello recordándome lo que podía haber perdido.

Y convenciéndome de que debía aprovechar lo que pudiera porque la vida era tan inesperada, tan injusta.

Lo guié dentro de mí, con cuidado, despacio, pero él se apartó.

-Mírame.

Levanté la cabeza, pero no abrí los ojos.

-Isabella, mírame.

Tardé un segundo en hacerlo, temiendo lo que pudiera ver en sus ojos.

-Muy bien, te estoy mirando –dije por fin.

Las pupilas de Edward estaban tan dilatadas que el verde era casi invisible.

-Di mi nombre.

- ¿Qué?

¿De qué estaba hablando y como podía pensar… y mucho menos hablar?

-Di mi nombre.

Intenté besarlo, pero él se apartó.

-Edward –murmuré, acariciando sus hombros-. Edward… - jadee mientras se introducía lentamente en mí.

Me apreté contra él, deseando que perdiera el control. Era tan frustrante perder el control en cuanto me tocaba con las manos, los ojos, incluso con sus palabras.

Cerrando los ojos, dejé que él marcara el ritmo, llevándome hasta el final con cada embestida de su cuerpo.

Un millón de sensaciones explotaron dentro de mí mientras repetía su nombre una y otra vez, arqueando la espalda…

Dejando escapar un grito ronco, enredé los dedos en su pelo, los espasmos sacudiendo mi cuerpo hasta que por fin cayó de lado, llevándome con él.

Con el cuerpo cubierto de sudor, las piernas enredadas en las de mi marido como un extraño lazo del que no podía soltarme, supe que subir ese último tramo de escaleras no era ya una preocupación.


¿Aullidos para esta lobita Alpha?

23 comentarios:

  1. wow!! que intenso y romantico, desesperante verlo pasar por esa situacion.
    Hay como espero por el proximo capitulo!!! quiero mas!!!1

    ResponderEliminar
  2. ME ENCANTO SIIIIIIIIIIIIIIIII NO PERDIO AL BEBE QUE BIEN DE VERDAD Y CASI POR UN COMDUCTOR BORRACHO BUENO CHAU ESPERO EL PROXIMO COM ANSIAS
    BESOS

    ResponderEliminar
  3. Esto esta fuera del estadio ... que capitulo Koko que capitulo .... he dicho anonada... me erizo la piel, me hizo un nudo en la garganta y se me escaparon unas lagrimllas....
    Auuuuuuuuuuuuuuu!!!! mi Alpha xD
    Gracias por regalarnos tu inspiracion
    Ada

    ResponderEliminar
  4. pobres de Edward y Bella han sufrido un buen, y su familia igual, espero y Jasper este bien y Alice, no, llore en este capitulo, que ingusta la vida de ellos
    bye, sigue escribiendo y te sigo leyendo.....
    que estes bien..alice_m&m

    ResponderEliminar
  5. espectacular el capi!!!
    ya toda la familia se enteró
    genial!

    ResponderEliminar
  6. Kokorito adore el cap!
    Tuvo de todo... suspenso y temor por saber como estaba Bella y el bebe, preocupación por no saber nada aun de Jasper sorpresa por parte de los Cullen al enterarse del embarazo de Bella y amor, porque definitivamente Edward y Bella no son solo amigos
    Hasta el prox cap!
    Besotes, Dany

    ResponderEliminar
  7. KOKOOOOOO ESTAAA GENIAAAL!!!!

    CUANDO LE DIRA EDWARD A BELLA QE SU FAMILIA SABE DEL BEBE? HEHEHE

    CONTINUA PORFAVOR!. ESTA SEMANA SE ME HIZO ETERNA A LA ESPERA

    DE ESTE CAPI!! PERO VALIO LA PENA! GRACIAS KOKO POR COMPARTIR

    TUS HISTORIAS Y DONES CON NOSOTRAS! TE AMAMOS


    SALUDOS, MELANIE

    ResponderEliminar
  8. Hola soy de argentina todas las noches leo tus novelas y estan superrrrrrrrrrr!!!!!!
    podrian contratarte para hacer el guion de amanecer pues tienes el don de la imaginacion
    felicitaciones!!!!!!
    Sigue deleitandome con tus novelas me transportan a un mundo diferente.

    ResponderEliminar
  9. Un super aullido para tí Kokoro.. Me encantó el capitulo.. Tus historias son las mejores!!!

    ResponderEliminar
  10. auuuuuuuuuuuuu koko te quedo perfecto me encanto ya estaba preparada por si se te ocurria matar al bebe... pero q sorpresa mas "agradable"...

    ResponderEliminar
  11. AAUUUUUUUUUUUUUUUUU!!!! GENIAL GENIAL GENIAL!!!! VISTE KOKO X ESO SOS LA MEJOR!!! ME ENCANTAN TODAS LAS HISTORIAS!!!! SEGUI ASI Y Q LO DEL PLAGIO NO T DESANIME!!! BOCHOOOOOOOOS! -CIELO-

    ResponderEliminar
  12. la familia ya se entero!!!
    dios espero ke eso haga ke apresuren las cosas y se vuelvan a casar
    jajjaja
    aunke seria un poco pronto
    pero espero ke todo salga bien con jasper y alice
    el cap me dejo consternada
    !!!!me trauma ke edward ensierre sus sentimientos!!!!
    pero bueno es parte de su personalidad
    me encanto
    tkm chao besos

    ResponderEliminar
  13. Se me perdieron las semanas...
    me puse a leer el kapi y no le entendi nada
    me quede en shock con lo que leia por que no le entendia...
    me fui al indice y me di cuenta de que no habia leido el kapi pasado...
    segun yo siempre estoy pendiente de cuando actualizas y de inmediato leo y se me hace imperdonable que se me haya ido el avion y no lo haya leido una semana y lo peor es que ni cuenta me di...jeje...
    nunka me habia pasado esto, pero bien dicn que siempre hay una primera vez para todo, ¿no?

    OK bueno llendo al kapi, me encantop y ya se reencendio la pasion en el ex-matrimonio...
    jeje, me encanto, me muero por leer el prox kapi...
    te kedo exelente, me despido y nos leemos...

    BESOSOS Y MORDISCOS

    ResponderEliminar
  14. Ayyyyyyyyyyy m encanto, esta genial Koko, estos dos no van a separarse nunca, por muchas adversidades q se presenten.

    bss

    ResponderEliminar
  15. amo esta pareja, son tan perfecto siempre en todo, ojala que se arreglen pronto y bella no se ponga testaruda con lo de volver juntos
    un beso guapa

    ResponderEliminar
  16. que lindo capi!!!!!
    menos mal que no murio el bebe, pero awwww sigo intrigada por jasper

    ResponderEliminar
  17. Sí mi "diosa del amor" eso es lo que tú nos das, siempre amor, amor es el nombre de todo sentimiento que del alma vuela para explotar en nuestro corazón. Besotes mi Koko

    ResponderEliminar
  18. ¡Pedazo de Edward, de marido.... esa bella, por dios que no lo deje escapar! Estoy de acuerdo, el capitulo tiene todo y termina, maravillosamente, espero la continuación muy, muy impaciente.

    ResponderEliminar
  19. hola como estas? me gusto mucho este capi !!! y me esncantan yodas tus istorias......... espero le erte pronto chau besotes !!! aaaaaauuuuuuuuuuuu............

    ResponderEliminar
  20. WOW !! Y tu dices ser Team Jacob ?? Si pareces estar enamorada de Edward completamente !!!!! Bueno el fic perfecto como todos , la pena no poder continuar leyendo : [ Pero supongo que la inspiracion te vendra pronto !!! Aqui te dejo mi aullido : Aaaaaaaaaaaaaaauuuuuuuuuuuuuu !!!!!!!!

    ResponderEliminar
  21. Genial, hermoso, fascinante... Como siempre.
    Mira "quien" te dejo el segundo comentario. Tendrá poca verguenza, dice que espera que continues, ¿para que para rovartelo también?. Ya lo ha quitado, pero mirare de vez en cuando, como lo vuelva a poner, la voy a poner verde a base de comentar en todas sus historias, aunque tenga que registrarme en un sitio que no me interesa.
    Ya termine el fic koko en cuanto lo pase a word te lo envio.
    Besos

    ResponderEliminar
  22. Wow Eres genial koko solo tu sabes como hacer que unas simples letras formen tanta vida y sentimientos.Eres la mejor.Att E.S

    ResponderEliminar
  23. joder!!!! que guay que estáaaaaaaaaaaaaaaaaaa!!! sigue por favor sigue escribiendo!!! me encantaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

    ResponderEliminar

Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...