En primera persona "Cap 02" - Jazzy W.

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Disclaimer: Todos los personajes le pertenecen a Stephenie Meyer y la historia a mi amiga Jazzy W.

Capitulo 2

Edward

“La mujeres sueñan conquistar a hombres con faldas, vampiros atormentados o millonarios solitarios….cuando se decidan por alguien real…

Que me llamen”

Anton, La Guerra del Amor

-¿El mundo va a terminar?-, preguntó Emmett entrando a mi ultra pequeña oficina, yo lo miré desde el escritorio tratando de entender su pregunta.

-¿Por qué lo haría?-, le repliqué

-Haz llegado antes de las 10 de la mañana…todo un reto para ti-, contestó sentándose frente a mi.

-Tenia que terminar el articulo-, murmuré girándome hacia la computadora, el se cruzó de brazos y me miró.

-Ya…pero eso rebatiría el hecho de que te fascina hacer enojar a Lauren para poder contentarla después con mimos-, replicó el burlón…lo miré algo exasperado... ¡Eso era un rumor! Y debo decir… del que yo no tenía nada que ver.

-Ya te dije que no ha pasado nada…entre Lauren y yo…ni pasará-, terminé mientras el reía.

Lauren era la editora de “Con H de Hombre”…cárgate con un nombrecito original para una revista destinada al publico masculino, publicación en la que Emmett y yo trabajábamos, sobra decir que su puesto le pedía…le exigía tener un carácter fuerte…cosa que la hacia parecer una tabla rígida…

No era que yo no creyera que ella pudiera soltarse…solo no estaba interesado en averiguarlo…pero bien dicen "Crea fama y échate a dormir"…como sea…Emmett tenia razón jamás entregaba los artículos a tiempo.

Me encargaba de una sección llamada… “Sobre un auto de lujo…”, que básicamente eran historias cortas de tipos con el dinero suficiente para realizar la mayoría de las fantasías de los hombres…ya saben autos, equipos de sonido...Home Teather…membresías...parrandas y mujeres.

No era el trabajo mas elocuente, pero se me daba fácil escribir y de algo tenia que servir tener un titulo en letras….

-Entonces me dirás la verdad-, inquirió el esperando, yo rodeé los ojos y miré el reloj…no aun no escapaba…

Mi amigo seguía esperando con una ceja levantada…Emmett era como lo que se puede llamar una persona transparente…de esos amigos leales…que “abundan”

El estaba a cargo de la sección de las noticias deportivas y era de verdad conocedor del tema solo un poco menos que…

-Alice dijo que estarías aquí-, murmuró Rosalie…exacto…solo menos que Rosalie

Emmett rodeó los ojos y Rose me miró ignorando a su archienemigo…esos dos necesitaba una buena sesión de sexo

-A veces odio que sea la gemela de mí cuñado ¿sabias?-, gruñí

Rosalie era la fotógrafa de la revista y realizaba las principales fotografías de las modelos y actrices que la revista publicaba en cada número, era la gemela de Jasper Hale, el cual había conocido para mi desgracia a Alice Cullen en una de las fiestas de la revista.

Llevaban casados un año y medio y aun me arrepentía de haber invitado a mi queridísima hermanita a acompañarme.

-Ya sabes…no se puede tener todo en la vida-, contestó ella encogiéndose de hombros

-Me dijo que fueras hombre y aceptaras tu derrota, perdiste la apuesta y ahora debes ir a la Junta en la Editorial-, continuó ella mientras Emmett me miraba curioso…oyendo a su Némesis pero sin mirarla.

Así eran estos dos una tensión sexual andando…claro que no podía decirlo, seria linchado doble, me centré en mis propios problemas, a buena hora se me ocurrió llevarle la contraía a Alice

-¿Qué apuesta?-, preguntó Emmett

-Una estupidez-, contesté sin darle importancia.

-Eso te pasa por ser idota y creer en tu linda cara-, replicó Rose

-Eso fue trampa…todos los saben, estaba planeado para que yo fuera a la Editorial-, le repliqué a Rosalie que solo rodeó los ojos.

Emmett me miró mas agudamente esperando una explicación, suspiré pesadamente y comencé…sabia que este relato terminaría con una carcajada suya.

Hace dos semanas había quedado con Alice y con Jasper sobre salir a platicar a algún bar, ya que ella me lo había pedido no me podía negar.

Alice era una de las dos mujeres que me importaban, hablando totalmente en serio, la otra era su mamá, Esme y mi madre adoptiva.

Toda la charla estuvo a las mil maravillas hasta que volvió al mismo tema… “Que mi talento estaba siendo tirado, que presentara una apuesta en la Editorial, que serian totalmente imparciales”.

La realidad era que yo no podía creerlo, además era un sentimiento de rechazo hacia seguir dependido de ellos, jamás dejaré de agradecer que los Cullen entraran a mi vida, pero eso no cambiaba el hecho de que de poder tener una carrera de escritor seria por mis propios medios, porque, que conveniente seria querer ser escritor cuando tu padre adoptivo es dueño de la mas famosa Editorial de la ciudad…

Mi padre Edward Masen fue la mano derecha de Carlisle Cullen cuando comenzó Cullen Editoriales, fueron grandes amigos hasta que el y mi madre murieron en un accidente de transito…quede huérfano a los diez…quedándome solo como opción una abuela que prácticamente no conocía…Carlisle y Esme me adoptaron, por decisión mía deje ambos apellidos, las dos partes de mi vida.

Como sea, papá estaba promocionado un concurso para la publicación de un libro…Alice estaba terca en que debería participar, así que me retó…

El lugar en el que estábamos estaba al tope y aun así la mujer rubia de largas piernas llamó mi atención…casi me podía imaginar el termino de la noche…no negaba que tenia éxito con las mujeres y mientras ellas entendieran que solo era un encuentro agradable sin mas intenciones todo iba bien.

-Vas a la Junta a que no puedes acostarte con ella-, apostó mi “dulce” hermanita, miré a Jasper buscando alguna trampa…ahora se que no se puede confiar en un hombre enamorado.

-Dejaras el tema si despierto con ella-, cerré el trato mientras Alice sonreía triunfante.

Todo se resume a lo siguiente, después de una hora de poner todo mi esfuerzo en ganar la apuesta.

La rubia se llama Tanya Denali, es chef en un restaurante italiano, le gusta el tango y correr por las mañanas….es romántica y delicada

Le fascina el chocolote y los gatos…de hecho tienen dos…una de ella y otra de su novia…

Solo como información extra…su novia Heidi es muralista y estuvo en algunas clases en la Universidad con Alice…

¡Fui emboscado!

-Eres un idiota-, murmuró Emmett entre risas al terminar de contarle

-¿No te mordiste la lengua?-, preguntó Rosalie casi de forma inaudible…

Era fácil los motivos de su ¡Odio!, Rosalie pensaba que Emmett era un barbarazo solo preocupado por el futbol de los domingos y Emmett que ella era una mujer con demasiados pantalones para su gusto.

¿Por qué las personas se complicaban tanto la vida?

-Cumpliré la apuesta si…pero no seré el idota que llega primero-, murmuré al fin mientras Emmett se levantaba negando.

-Suerte mi seductor de nenas-, se burló mientras salía, Rosalie reprimió una risita y me miró.

-La Junta empieza en una hora…Alice dijo que estaría aquí si no has salio en vente minutos-, murmuró señalándome con el dedo.

-¿Te paga algo por ser su espía?-, pregunté mientras Rosalie rodeaba los ojos y salía.

Solo había una lección muy importante de todo esto…no apuestes con el diablo

***

-Me alegra que hayas venido hijo-, murmuró Carlisle mientras yo asentía entrando a la Editorial, me sentía incomodo, pero no podía decirlo…no quería esto….no quería que fuera parcial…quería que si de alguna forma entregaba una historia fuera tratada exactamente como la de cualquier otro escritor

-Agradéceselo a Alice…sabes como es cuando algo se le mete a la cabeza-, contesté medio sonriendo, el asintió con gesto sabio y me despedí con la mano entrando a la sala

Había mucha gente y me sorprendió mirar lo dispares que eran las edades.

Al parecer ahora todos podíamos escribir, una mujer extremadamente arreglada y con piernas de infarto me sonrió….le devolví la sonrisa, pero pasé de largo, no me iba a poner a ligar aquí…digo era cínico pero no tanto, además la voz molesta en mi, esa parte que aun no renunciaba a mirar un libro con mi nombre publicado era lo suficientemente fuerte como para mantenerme centrado.

Me senté junto a una chica que jugaba con su teléfono, se veía demasiado chistosa mordiéndose el labio.

-¿Matando el tiempo?-, murmuré distraídamente, para no aburrirme y que no me pusiera a maldecir a Alice en los idiomas que me supiera.

-Lo hago cuando estoy nerviosa-, dijo sin mirarme, guardó su teléfono y alzó la vista

Era linda, no del tipo me muero por tu belleza, pero era linda y ese cabello….bien me puso más que la mujer de las piernas largas….pero de nuevo me centré

-La espera no ayuda a los nervios-, siguió y yo le di la razón tratando de bromear guiñándole el ojo a modo de gesto de simpatía… ¿error?, ella frunció el ceño y se giró ignorándome por completo…

¡Y ahora que hice!

-¿Eres escritora?-, pregunté, digo no iba a dejar que ella terminara la conversación así tan, tan abruptamente

-No solo me gusta ir a lugares, ponerme nerviosa, y jugar con mi teléfono-, contestó…¡Mira!, una mujer ruda pero hasta cierto grado simpática, la miré sin poder quítame la sonrisa de la cara…estaba comenzando a caerme bien

Ella cedió un poco y aproveché para presentarme…al menos quería saber su nombre digo no todos los días me ignoran, me hacen reír y me intrigan tan fácilmente

Omití el apellido por que el mencionar el Cullen aunque fuera después del Masen tendría una reacción que tal vez no quisiera imaginar

Papa comenzó a hablar y presté atención hasta que Bella… la chica simpática a mi lado dijo otro comentario del millón… ¡Sus ideas bajo el colchón!

Cuando nos entregaron los papeles pensé que hasta ahí llegaba mi pago por la apuesta, así que me dediqué a observar a la señorita peculiar, hojeando las hojas para despiste

Ella se miraba nerviosa y logré sacarle el motivo….falta de ideas, miedo al fracaso, todo en uno…pregúntenmelo a mi y luego me encontré dándole ánimos…

“Tienes 2 opciones”, le dije

Siendo sinceros todos las teníamos y con ese pensamiento comencé a escribir…tal vez pudiera entrar al concurso y competir como cualquier otro….tal vez…

Ella terminó primero y me despedí con una sonrisa, cuando acabé salí rumbo a la recepción…debía pensar en una idea para el concurso

Ya en el auto mi teléfono sonó y miré taladrando el nombre de mi hermana.

-¿Espero que hayas ido a la Junta Edward Anthony Masen Cullen?-, advirtió ella

-Querida no crees que ya estoy grandecito para que me amenaces como mamá gallina-, murmuré y ella bufó.

-Hasta los más grandes necesitan un empujón para su futuro…

-O un giro del destino, dios ruegue que las hadas permitan la inspiración divina-, terminé teatralmente

-Eres un idota Edward-, susurró ella

-Si…pero me aceptas tal cual…eso es verdadero amor hermanita-, bromeé sonriendo, después de todo en secreto le agradecía a mi hermana por la apuesta.

N/A: Bien ahora conocen sobre Edward…

Nos leemos chicas

Gracias

Las quiero

Jazzy