martes, 8 de septiembre de 2009

Jake y Nessie "Soñando despiertos" - Naty Celeste

Disclaimer: Jake y Nessie son de Stephenie Meyer y la historia es de Naty Celeste ADVERTENCIA: Lemmon!! sobre aviso no hay engaño.


Soñando despiertos

A pesar de que las heridas de Seth ya estaban sanas y que el chico insistía mas que nunca en salir a patrullar un rato, creí que debíamos escuchar al doctor Colmillos. Nos había dicho que no entrara en fase por unos días, para que los huesos sanaran completamente antes de forzarlos a cambiar, y yo planeaba hacer lo que decía al pie de la letra. Así que había insistido en hacer doble turno, lo que me dejaba corriendo por el perímetro de La Push desde las 5 de la tarde, hasta ahora, que a juzgar por el cielo, debían ser alrededor de las 3 de la mañana.

No estaba tan cansado, pero si harto de extrañar a Nessie. Por fortuna, Leah había salido, y como Seth no podía entrar en fase, tenía mi cabeza para mí sólo. Para variar.

Ahora le tocaba a la manada de Sam hacerse cargo de la vigilancia por unas horas, así que ya estaba libre de volver a casa y dormir un poco.

Pasé la tarde entera con Ness, fuimos a pasear un rato por la playa y luego decidimos hacer salto de acantilado. Claro que esa fue su idea, no estoy precisamente “a favor” de ver saltar al amor de mi vida por un acantilado. Pero si ella quería hacerlo, yo prefería estar presente.

Pasamos el tiempo juntos hasta prácticamente las 4:59 de la tarde, cuando Leah me llamó para avisarme que ya debía irse y que había dejado la reserva sola.

Fue un turno tranquilo -no aparecieron más chupasangres desde el otro día-, pero por la noche comenzó a llover y el bosque se puso bastante lodoso, así que tendría que darme una ducha para quitarme el olor a perro mojado. Me reí internamente al imaginarme a Ros-xigenada escuchándome decir esto. Pero debía admitirlo, realmente olía a perro mojado.

Salí de fase cuando me acerqué a la casa. ¿Estaba loco o sentí la fragancia de Ness? Me puse los pantalones y agudicé el oído para intentar detectarla dentro de la casa. Si, definitivamente estaba ahí dentro. Pero su respiración era profunda y regular. Supuse que estaría durmiendo.

Entré lo más sigilosamente posible, intentando no despertarla. Estaba recostada en nuestra- bueno “mi” habitación, acurrucada encima de los cobertores en un lado de la cama extra grande. Me derretí al verla tan relajada, tan serena, tan hermosa. Me acerqué y le di un beso en la mejilla muy despacio. Un pedazo de papel que estaba sobre mi almohada me llamó la atención. Me estiré para agarrarlo y leí la nota de Nessie:

“Te extrañaba mucho y no podía dormir, así que supuse que venir a tu cama me ayudaría. Despiértame cuando llegues. Te amo! Ness”

Mi corazón saltó de emoción al ver que Ness me había extrañado tanto como yo a ella. Guardé la nota para que no pudiera tirarla cuando se despertara y le di otro pequeño beso en la mejilla. Decidí no despertarla. Era tarde y no había dormido bien, así que no quise que después no pudiera pegar un ojo de nuevo.

Sé que no puede enfermarse, pero parecía tener un poco de frío, así que tomé un cubrecama fino del armario y la tapé con él. Después cerré las cortinas para que la luz no le molestara en la mañana y fui a darme una ducha.

Estaba realmente contento de tenerla aquí conmigo. Cuando el agua me tocó, cerré los ojos y me transporte al día anterior. Nessie se veía tan sexy bajo el agua, completamente mojada -en más de un sentido… De solo pensar en que había corrido todo ese tramo solo para estar conmigo me volvía loco, aunque definitivamente debió haberme avisado; le hubiera dado mil vueltas al mundo si hubiera sabido que me quería con ella en ese momento. No debió cansarse tanto, y para colmo, hoy nos pasamos el día paseando y haciendo salto de acantilado. Soy un tonto, debí haberle dicho que durmiera un poco. O quizá proponerle ver una película desde el sofá. Sabía exactamente cuáles eran las películas que hacían que se durmiera antes de los títulos de apertura.

Pero es que no lo pensé muy bien en el momento. Sólo quería tenerla cerca. El hecho de que ella llegara justo cuando más la necesitaba me había hecho ver que quizá me quisiera una décima parte de lo que yo la quería. Quizá nuestra conexión era lo suficientemente fuerte como para que sintiera mi angustia por Seth. Lo de anoche era justo lo que necesitaba para volver a mis cabales.

Y el sólo imaginarme en este mismo lugar, justo entre sus piernas… escuchándola gemir en mis recuerdos con cada uno de mis movimientos… casi podía sentir sus pantorrillas entrelazadas al rededor de mi cadera, sus uñas clavadas en mi espalda… Pensar en el más mínimo detalle de Ness hacía que me hirviera la sangre.

Abrí los ojos para no dejar que el recuerdo se expandiera demasiado por mi cabeza. Nessie estaba dormida y no estaba dispuesto a despertarla solo para calmarme. No podía ser tan egoísta. Sacudí la cabeza un poco y comencé a lavarme el cabello. Cuando tiré la cabeza para atrás para enjuagarme mis ojos se posaron en la grieta de la pared. Estiré la mano y pasé los dedos suavemente, intentando no desesperarme por lo mucho que pude haberla lastimado. Respiré hondo y me concentré en cuando la estaba mirando dormir anoche. Le había pasado los dedos por la espalda por lo menos un par de cientos de veces, y no había visto -ni sentido- ninguna marca o moretón en todo su cuerpo.

Me alegré y sonreí porque fuera tan fuerte. Un humano común no habría soportado lo descontrolado que me encontraba en ese momento. Me moriría si cualquier cosa le pasara, pero yo mismo me encargaría de matarme de la forma más tortuosa posible si el que la lastimara fuera yo. Casi me enfermo ante la idea de verla lastimada. Debía controlarme un poco más cuando la tuviera en mis manos. Sacudí la cabeza de nuevo –creo que se estaba volviendo un hábito- y cerré la ducha.

Mi cuerpo no tarda mucho en secarse solo, por el calor. Así que solo me pasé una toalla rápidamente y me puse unos boxers negros al cuerpo que estaban en el armario del baño en caso de que algún miembro de la familia de Ness decidiera parar a visitar de improvisto.

Salí del baño caminando sin hacer ruido. Para cuando llegué a la cama ya estaba completamente seco, así que me recosté por encima de las cobijas a un lado de Ness, intentando ocupar el menor espacio posible para que no estuviera incomoda y se despertara.

La miré un rato. Había algo raro en la forma en que se había acomodado. Seguía pareciendo que tenía frío. La miré unos momentos más y después de unos minutos sus labios comenzaron a temblar muy suavemente. Quizás me preocupaba demasiado, pero estaba bastante seguro de que tenía frío. Perfecto.

Me arrimé un poco y pasé mi brazo por debajo de su cabeza y alrededor de sus hombros, quitando y reemplazando la almohada con él. Casi automáticamente Ness se recostó sobre mi pecho y pasó una de sus piernas por encima de las mías sin abrir los ojos. Me mordí el labio e intenté pensar en otra cosa. Ahora me parecía relajada de nuevo, como si disfrutara de una noche de sueños tranquilos y reparadores.

La observé dormir por un rato más y luego creo que me quedé dormido. No estoy muy seguro.

Lo siguiente de lo que fui conciente fue ver a Ness corriendo desesperada por el bosque, llorando casi a los gritos. Intenté gritarle, preguntarle qué era lo que le pasaba, de qué estaba escapando, pero no tenía forma de comunicarme con ella. También me desesperé, temiendo que lo que fuera que la estaba persiguiendo le ganara la carrera. El día era gris, como siempre en Forks, pero había algo en el aire que hacía que el lugar me pareciera tétrico. Quizás era la presión del aire o algo así. Posiblemente Ness también lo había sentido, y estaba asustada por la tormenta que parecía aproximarse.

Deseé saber hacia donde planeaba dirigirse y en un pestañeo me encontré en una casa extraña. Miré a mí alrededor: las paredes eran de un fuerte color escarlata y los muebles de madera oscura. Me parecía un poco familiar, pero no recordaba de dónde la conocía.

No alcancé ni a fruncir el seño. Sólo pararon dos segundos antes de que me sobresaltara por un ruido que venía de la puerta. Ness entraba a toda prisa, sus ojos hinchados de tanto llorar y su pelo alborotado por la carrera. La observé dejándose caer en el suelo de rodillas, y luego vi como se recostaba de costado, las lagrimas cayendo de sus ojos sin tregua. Ya me dolía el pecho de tanto gritar su nombre. Quería saber qué rayos le pasaba, pero parecía que ni siquiera me escuchaba, como si no estuviera ahí realmente. Intenté tocar su espalda y mi mano la atravesó como si yo fuera un holograma.

Mis ganas de llorar me sobrepasaron, pronto estaba tan abatido como ella. Me senté en el suelo a su lado, lo más cerca que pude sin tocarla, y mi corazón dio un vuelco cuando vi lo que tenía entre las manos. Era una foto de nosotros. Recordaba esa foto, era una de mis favoritas. Nos la había sacado Jared en el cumpleaños de Claire, era una de las primeras que nos habíamos sacado como una pareja oficial. En la imagen se nos veía a nosotros dos, mi brazo detrás de sus hombros. Justo antes de que el flash se activara, había volteado la cabeza y le había dado un beso en la mejilla. Ness había puesto la más increíble de las sonrisas, sonrojándose de pies a cabeza. Se veía tan tierna…

Pero no entendía qué era lo que le pasaba ahora. Se apretaba la foto al pecho como intentando evitar que éste se le rompiera en mil pedazos. Intenté ver si estaba herida, quizá lo que fuera que la perseguía la había alcanzado, pero no logré ver ninguna señal de sangre en su ropa. Entonces lo noté. Iba vestida de negro. Totalmente de negro.

Volví a ver a mí alrededor y me petrifiqué al reconocer el lugar. Las paredes eran diferentes, no solían ser de este color, sino blancas, pero definitivamente era el lugar… La funeraria de Forks. ¿Que rayos? Me costó unos segundos asimilar los hechos. Y me tranquilicé al entenderlo. Nessie no estaba herida, estaba llorando por mí. Por eso no podía tocarla… Estaba… ¿muerto?

Finalmente pude volver a respirar un poco, mientras fuera yo el que estaba muerto, todo estaría bien. Ness estaría bien. Quise decirle que no se preocupara, que siempre estaría con ella, que debía ser fuerte y seguir adelante, pero seguía sin escucharme, ahora apretándose el pecho con fuerza con las dos manos. Estaba hecha una bola desmarañada en el piso, sus ojos parecían vacíos, como si le hubieran arrancado el corazón. Se veía mucho peor de lo que alguna vez vi a Bella cuando Edward decidió dejarla hace ya tantos años.

Esos ojos no se podían apagar… nunca. Tenía que encontrar una forma de hacerle entender que todo iba a estar bien, que ella era la persona más maravillosa del mundo, y que podía superar cualquier cosa. Quería que supiera lo mucho que la amaba, y que daría mi vida mil veces si eso significaba que ella podría seguir existiendo. Quería decirle que no se preocupara, que pasaría una eternidad en el mismísimo infierno si eso significaba que ella seguiría iluminando el mundo… pero seguía sin escucharme. Solo lloraba desconsolada, desmoronada en el suelo de aquel lugar frío y deprimente.

Soltó un grito muy agudo entre llantos y abrí los ojos como platos a la vez que reprimía uno propio. Estaba en la oscuridad de nuevo. Respirando agitadamente y con el corazón latiendo a mil por hora, pero latiendo al fin. Seguía viendo a Ness tirada en el piso delante de mis ojos. Aún estaba sentado frente a ella sin poder hacer nada. ¿No se suponía que las pesadillas se terminaban cuando te despertabas?

Noté algo tibio y húmedo bajando por mi pecho. Era una lágrima. Era Ness. Estaba llorando en sueños. La miré unos segundos y finalmente entendí lo que ocurría. No era mi pesadilla, era la suya. Seguíamos recostados en mi cama. Su mano estaba apretada contra mi pecho, haciendo que viera lo que pasaba por su mente. Probablemente había sido el miedo que le produjo el sueño lo que había activado su don.

Puse mi mano libre en su mejilla y me acerque a su oído. Mi imagen en el sueño hizo lo mismo, por fin pudiéndola tocar. Su cara estaba muy fría en tanto la realidad como la fantasía.

- Todo está bien, Ness… estoy aquí. –le susurré. Levantó la vista del suelo de la funeraria y me miró con ojos incrédulos y desorbitados. Le di un beso muy suave en la mejilla y la acaricié con las yemas de los dedos. Se incorporó del suelo y me pasó los brazos por el cuello, abrazándome con fuerza.

Era muy raro, en la realidad solo había suspirado. ¿Era posible que estuviera dentro de su sueño?

Me reí internamente ante la idea de ser el hombre de los sueños de Nessie.

Cerré los ojos. Me seguía abrazando, ocultando su rostro en mi pecho. Ya no lloraba, solo respiraba agitadamente como si no pudiera creer lo que estaba pasando, se alejó un poco para mirarme.

- ¿Que pasó? –escuché su hermosa voz en mi cabeza. ¿Cómo rayos le contestaba sin hablar en voz alta? No tenía ni idea, ella continuó hablando.

– Creí que estabas– paré lo que decía poniendo un dedo sobre sus labios. Negué con la cabeza y le sonreí para que supiera que todo estaba bien. Se abalanzó a mis brazos de nuevo y la imagen se desvaneció.

Vi los ojos de Ness pestañeando rápidamente. Y la apreté más a mi pecho para que supiera que estaba ahí para ella. Bajé la mano a su mandíbula y le di un beso en los labios.

- Jake… -susurró cuando alejé la cabeza unos centímetros. Otra lágrima se deslizó por su mejilla y la limpié con los labios, para luego volver a besarla.

- ¡Jake! –esta vez su voz tenía el tono de un grito, aunque seguía con el volumen de un susurro contra mi boca. Sonreí mientras sus brazos me apretaban un poco más a ella.

- Deberías tener bien claro que ni muerto te dejaría.

Le dije en tono burlón. Se rió nerviosa y suspiró profundamente. Sentía todo su cuerpo tenso y frío, como si alguien le hubiera dado un choque eléctrico.

- Sólo fue un sueño. No te preocupes. Duerme mi amor, estoy aquí para protegerte. –Murmuré acercándome a su oído y acariciando su pelo. Cerró los ojos, pero sus músculos seguían tensionados.

Seguí bajando mi mano y acaricié su espalda por encima del camisón de seda que llevaba.

- Relájate… no voy a ir a ningún lado. –Le aseguré. Pasé las puntas de mis dedos lentamente desde su cuello hasta su cadera, una y otra vez. Todo su cuerpo se fue relajando poco a poco, músculo a músculo.

Volví a dormitarme, pero me sacó del transe otro pequeño grito sofocado de Ness. Abrí los ojos y la vi removiéndose inquieta. Ya ni siquiera estaba apoyada en mi pecho, estaba estirada por todo su lado de la cama, boca arriba y con los brazos a sus costados. Miré el reloj de la mesita de luz. Marcaba casi las seis. Lamenté que no lograra descansar tranquila ni dos horas seguidas. Estaba tan cansada, ¿y todo lo que hacía su cuerpo era darle otra pesadilla?

Le toqué la mejilla de nuevo. Esta vez estaba caliente. Muy caliente. Si no hubiera sabido que era imposible, hubiera pensado que era fiebre. Su piel estaba a… dos grados centígrados más caliente que la mía. Que raro, normalmente era al revés. Moví mi mano y la presioné ligeramente contra su pecho para ver si había sentido bien ¿tres grados? Quizá sí era posible que tuviera fiebre.

Justo cuando iba a despertarla para ver que rayos pasaba, apretó los ojos y dejó escapar un gemido. Abrí los ojos como platos, ¿había escuchado bien? ¿¿¿Un gemido??? La miré con más atención. La mano que tenía apoyada en el colchón entre nosotros estaba agarrando un puñado de las sábanas, tirando de ellas.

Me mordí el labio intentando evitarlo, resistiéndome a ver en sus sueños de nuevo. Definitivamente esto no era una pesadilla en la que me necesitara para despertarla. Pero me moría de curiosidad por saber con qué estaba soñan-

- Jake… -me interrumpió diciendo mi nombre en medio de un gemido que hizo que se me erizaran los pelos de la nuca de puro placer. Soñaba conmigo. ¡Nessie estaba soñando conmigo! La alegría que me embargó casi hizo que me explotara el pecho.

Tomé su mano sin pensarlo demasiado y la apreté contra mi pecho de nuevo. Las imágenes comenzaron a flotar por mi cabeza. Esta vez no estaba desesperada. No había absolutamente nada de malo con este sueño. Porque apenas me tocó me encontré encima de su cuerpo, presionándola contra mí. Estábamos ella y yo, juntos en el sofá de la sala. Nuestras piernas y brazos entrelazados y nuestras bocas juntas. Tardé un segundo en recordar cómo debía hacer para mover a mi representación en su cabeza. Esta vez fui yo quien seguí a mi alter-ego de ensueño: Me posicioné sobre Ness, sin apartar su mano de mi pecho y le besé el cuello y la mandíbula suavemente. Al cerrar los ojos veía la sala y a Ness despierta debajo de mi, me sentía a mi mismo besándole el cuello sobre el sofá. Al abrirlos estábamos en la cama de nuevo, sus ojos cerrados. En ambas imágenes yo me movía exactamente igual.

Puse mi mano en su mandíbula y la besé en los labios, esperando que se despertara. No podía seguir haciendo esto si ella no estaba conciente. Al contacto con mis labios, la mano que no tenía en mi pecho se posó en mi espalda.

Volteé la cabeza, pero su mano no me había tocado. No entendí muy bien, pero de alguna forma Ness hacía que la sintiera sin siquiera tocarme. Cerré los ojos, mi mirada apuntando todavía a mi espalda. Y ahí estaba, bajo la luz brillante de la ilusión de la sala, la mano de Ness se posaba en mi espalda, paseándose suavemente desde los hombros a la cintura. Lo único que se me ocurrió para explicarme lo que pasaba, fue suponer que el poder de Ness hacía que, no solo supiera lo que pensaba, sino que hacía que sintiera lo que ella hacía en su mente.

Mantuve los ojos cerrados, mirándola curvar su espalda y pegar su pecho al mío. Sentí sus pezones tensos en la piel de mi pecho. Gruñí y volví a besarla, esta vez con los ojos cerrados, un poco más ansioso, pero concentrándome en no pasarme de la raya. Al fin y al cabo, Ness seguía inconciente. No importaba lo excitante que fuera estar dentro de su mente, en esta escena ardiente e íntima que compartíamos, estaba mal darle algo más que un par de besos si estaba dormida. Mordió ligeramente mi cuello en el sueño y pude sentir cómo mi erección se pegaba más a su pelvis. Gruñí y me alejé, cortando el contando el contacto con su cuerpo, y por lo tanto, la conexión con su mente.

Me tiré de espaldas en mi lado de la cama y me llevé las manos a la cara, cubriéndome los ojos. Mi mente se sentía vacía y oscura sin la luz del sueño de Ness y sus caricias. Pero eso pronto cambió. Todavía dormida, movió su brazo diciendo mi nombre. Su mano cayó en mi estómago y volví a sentir sus caricias en mi mente. Quedé aturdido, la escena había avanzado bastante, y Nessie respiraba entrecortadamente mientras mi mano se movía sobre su entrepierna. Esto seguramente era mucho mejor que la realidad virtual. Volví a sentir lo que mi personaje sentía. Mi erección pegada a su cuerpo, mi mano moviéndose constante y rítmicamente por sobre su ropa interior, su respiración entrecortada chocándome en el cuello…

Tragué en seco e hice uso de toda mi fuerza para abrir los ojos. Puse su mano en mi brazo para no dejar de ver lo que soñaba y me coloqué encima de ella, apoyándome en mis manos y rodillas para no asustarla cuando despertara.

- Ness… -me aclaré la garganta, ya que casi no se escuchaba mi voz- Ness, por favor despierta. –le rogué.

Las imágenes se volvieron flashes, como si la estuviera reproduciendo un aparato de dispositivas. Abrí los ojos, viéndola pestañear rápidamente para acostumbrarse a la oscuridad.

- ¿Jake? ¿Qué sucede? -Tragué en seco. ¿Qué iba a decirle? ¿“Noté que soñabas conmigo y pensé en despertarte para evitar parecer un enfermo al tomarte mientras dormías”? Me sonrojé… y lo notó.

Miró alrededor y vio su mano en mi brazo. La quitó rápidamente.

- ¡Lo siento tanto! –se puso roja como un tomate- No fue mi intención despertarte de nuevo, estaba dormida… no creí que pudiera activarse mi habilidad estando dormida.

Siguió balbuceando un par de excusas más y luego me di cuenta que ella pensaba que la había despertado para que parara las imágenes.

- No, Ness… –la interrumpí en la mitad de una frase y negué con la cabeza y le susurré- No estoy molesto.

- ¿No?

- No, y tampoco quiero que pares las imágenes.

Me miró con ojos cargados de curiosidad. Me acerqué para susurrarle al oído.

- Parecía que la estábamos pasando bastante bien… y no pude resistirme a participar mas… activamente. –Sus manos se posaron en mi espalda y se pasearon por mis hombros. Sonreí y le besé el cuello despacio, saboreando su piel. Cuando mordí un poco el lóbulo de su oreja sus manos pasaron a mi cara y me atrajeron para que la besara en la boca. Su beso era deseoso, pasional. Su lengua se movió por mi boca ansiosa de encontrarse con la mía. Y luego sus dientes se agarraron a mi labio inferior. Me sentí desfallecer y me dejé caer de a poco para apretarme contra su cuerpo.

Mi mano comenzó a levantar su camisón para poder rozar la piel de su cintura, y sus piernas se doblaron, a la vez que las apretaba a los costados de mi cadera.

- Me alegro mucho de que volvieras. –Susurró con la respiración entrecortada cuando bajé a su cuello de nuevo.

- También yo –logré decir con el poco aire que era capaz de meter en mis pulmones.

Me pegué más a su cuerpo, mi erección justo encima de su entrepierna. Gimió y tiro la cabeza para atrás, cerrando los ojos. Sus manos bajaron por mi espalda hasta el comienzo de mis boxers. Tomó la tela entre sus dedos mientras yo volvía a besarla y los bajó despacio solo un poco, pero lo suficiente. Mi mano bajó por su estómago, por encima de la seda y la dejé quieta sobre su ropa interior, estaba increíblemente húmeda… Moví un poco mis dedos haciendo que arqueara la espalda y pegara sus pezones a mi pecho justo como en el sueño.

- Ness… -le susurré.

- ¿Mmm?

- ¿Podrías…? -dudé y abrió los ojos para mirarme. No sabía cómo pedírselo. Tomé aire y solté lo primero que me vino a la mente.

- Tu sueño me gustaba mucho. –intenté decirlo en voz alta, pero salió en un volumen aún más bajo. Se mordió el labio y sonrió de forma muy pícara. Las imágenes comenzaron a fluir de golpe de nuevo: Ness completamente desnuda, sentada sobre mí y moviéndose rítmicamente de arriba a abajo… sus pechos firmes saltando con cada uno de sus movimientos.

Me volví loco, ni siquiera tendría tiempo de quitarle la ropa interior, el calor que me inundaba era demasiado como para esperar siquiera un segundo. Usé la mano que tenía en su entrepierna para hacer a un lado la tela y entré en ella sin más advertencia que un gruñido profundo.

Gritó de forma muy sensual y todo su cuerpo se estremeció cuando comencé a moverme de nuevo. Tenía la boca apoyada en su hombro, y sentía su respiración entrecortada en mi clavícula.

Puso sus manos en mi espalda apretando mi cuerpo contra el suyo y mandando más imágenes a mi cabeza. Ahora estábamos en el comedor, sus manos en mis muñecas y su lengua deslizándose por mi miembro como el otro día. Aumenté la fuerza y la escuché gemir de nuevo, esta vez contra la piel de mi cuello.

Salí de su cuerpo completamente y me clavé en ella de nuevo con fuerza y hasta lo más hondo que pude.

- ¡Ahh, Jake! –me gritó. Volví a hacerlo. Sus uñas se clavaron en mi espalda mientras repetía el procedimiento una y otra vez. Después de un rato las imágenes de mi cabeza perdieron sentido, supuse que no podía concentrarse en mantenerlas por mucho tiempo. Me alegré un poco porque sus pensamientos se volvieran difusos, si seguía con eso no aguantaría por mucho más tiempo.

Sin embargo, me moví mas rápido, escucharla gemir de esa manera me descontrolaba. Ahora todo lo que había en mi cabeza eran esos hermosos gritos de placer.

Cuando noté que comenzaba a venirse me metí lo más profundo que pude en ella, y esta vez no salí. Alterné entre apretar mis caderas con fuerza contra las suyas y alejarme unos pocos centímetros varias veces. Cuando la sentí apretarse a mí alrededor no tardé en venirme yo también.

- Jake… -volvió a decir, esta vez sin voz, sólo dejando escapar el aire de sus pulmones. Hice lo mismo diciendo su nombre cuando mi cuerpo dejó de convulsionarse internamente por el placer que me causaba.

Me quedé quieto unos segundos y luego volví a apoyarme en mis manos y rodillas para salir de su interior lentamente. Se estremeció de nuevo cuando el aire tocó las partes de su piel que estaban expuestas y luego suspiró profundamente.

La besé una vez más y me dejé caer a su lado tomando su mano. Nos pusimos de costado para que nuestros rostros estuvieran enfrentados y me miró con esos hermosos ojos fijamente por un momento. Luego susurró en tierno y sensual “gracias” en mi cabeza.

- ¿Qué? –La miré dudando que hubiera perdido el juicio. Me sonrió.

- Por decirme lo que querías. Me gustó que me pidieras que nos imaginara.

Me puse un poco colorado y le toqué la cara con mi mano libre.

- Es que de verdad me gustó ese sueño. –Susurré antes de darle un pequeño beso en la comisura de los labios. Suspiró de nuevo y miró el reloj.

- Supongo que debemos levantarnos.

Miré la hora. Eran cerca de las 10. Fruncí el seño.

- ¿Tienes que encontrarte con tu familia?

- No… pensé que volverías a patrullar hoy. –Le sonreí mientras la abrazaba con un solo brazo.

- Nop –Le dije agregando una “P” al final de la palabra con una sonrisa que casi me desgarra la cara. También ella sonrió y me dio un beso en la mejilla.

Me subí los boxers y me puse de pie en un solo movimiento. Me miró curiosa y frunció el seño.

- ¿A dónde crees que vas? -Yo seguí sonriendo.

- A prepararnos el desayuno… -Puse una rodilla sobre a cama y me incliné para darle un beso corto en los labios- Tenemos todo el día para nosotros…

Me incorporé y me dirigí a la puerta.

- …Y necesitarás energía. –Le guiñé el ojo y sonrió de oreja a oreja mientras se dejaba caer en la cama de espaldas y su cara se ruborizaba solo un poco.

“Todo el día para nosotros”… La frase sonaba simplemente perfecta.

19 comentarios:

  1. WIIIII YO QUIERO PERO TODO EL DIA CON JAKE!!!!

    ESE HOMBRE ES PERFECTO!!!! AHHH!!!!

    Naty TE AMO!! No sabes lo feliz que me haces con estos Oneshoots!!! Te adoro!!!

    y ustedes que dicen chicas? jojojo

    ResponderEliminar
  2. Todas queremos un Jack Black en nuestras camas... cocina, sillon, baño, y podria nombrar mil ligares de fantasias mas!!!
    Grrr... ;)
    Bueno me voy a divertir un rato... alguien ya tiene que levanatrse y querra un muy buenos dias!
    Beso ♥

    ResponderEliminar
  3. NECESITO UN JAKE EN MI CAMA YA!!

    ResponderEliminar
  4. aiiiiiiii k lindoooo , yo quiero uno = :P

    y sigo pensando en mi regalo jajajajaaj.

    te adoro NTLS ..mil besos

    ya estamos en la cuenta regresiva ..falta poquito para el 17 ..xD

    ResponderEliminar
  5. Wow!! esos dos van a acabar con mi vida un dia de estos jejejejeje!!!!!

    Demasiado bueno.

    Besos.

    ResponderEliminar
  6. SI NATY YO TMBN TE AMO JEJE
    GRAX ESTOS FANFICS
    ME HACEN EL DIA (Y LA NOCHE TMBN :P)

    OMG COMO KISIERA SER NESSIE!!!
    JB TE AMOO!!!

    ResponderEliminar
  7. Guau! qué fantástica eres, súper Naty que nos transportas a las celestiales nubes, no nos dejes caer. Al final ayer te pusistes las pilas no? y de qué manera .... ¡Dios!, eres, cómo eres. A Koko le va a dar un patatús. Un besote. NTLS FOREVER.

    ResponderEliminar
  8. awww... me enkantoo .. si ia no me pierdo inguna historia de estas ...

    ResponderEliminar
  9. woow simplemente perfecto!!
    Naty y Kokoro: son las mejores!!

    ResponderEliminar
  10. naty tus oneshoot son los mejores! aplausos a una gran lemmonera !
    JAKE, JAKE, JAKE, JAKE, JAKE....I want/need you...!!!!!!!!
    me mato la frase, "ni muerto te dejaría"
    :)

    ResponderEliminar
  11. ah diiooos!! me encato!! ya quiero mas y mas y mas!!! a naty eres toda un loks!"!!!! se te quiero amor!!! espero el otro y sorry por no comentar temprano es q tengo muchos problemas y interrupciones por montones :S:@ :| XD espero el proximo!! que dios te bendiga y que te ilumine siempre salud y amor =D xoxo ah que fino quiero un sueños asi con mi vampiro-lobo ejjejejej

    ResponderEliminar
  12. ahhhhhhhhh mi naty..... eres lo mejor!!!!!!!!!!!! mil besotes bella!!! me ha mejorado la mañana....ahh quiero definily un Jake asi ....

    ResponderEliminar
  13. ATENCION!!!

    SI SON TEAM JACOB Y TIENEN LIVEJOURNAL, UNANSE A LA COMUNIDAD DE JACOB MAS GRANDE DE LIVEJOURNAL:

    SORT OF BEAUTIFUL

    http://community.livejournal.com/sortofbeautiful/

    ANDAMOS RECLUTANDO MIEMBROS!!!

    BIENVENIDAS CHICAS!!!

    AGUANTE JACOB!!!

    ResponderEliminar
  14. Quiero un Jake YAA!!!
    Jajaja! El Lobito Sepsi me encanta xDDD
    No es justo que se quede con Renesmee! Me estaba ilusionando demasiado cuando Bella decidio quedarse con Edward, pense "Un Jake para mi sola"...
    Ni modo... U.U
    xDDD

    ResponderEliminar
  15. Kyaaaaaaaaaaaaaaa!
    Naty dios! no sabes lo loca q me vuelven tus one shoots! no me pierdo ninguno y siempre entro a ver si kokoro a actualizado ejeje
    AMO a JAKE!!!
    Lo quiero mi cama! ash! porque no puede ser posible!!!!T-T
    bueno no solo en mi cama..jeje puede ser en mi cocina, en mi sofa, en la ducha, en la bañera, en la piscina o simplemente en el suelo o....
    DIOS Q PERVER SOY O.O!
    jaja y que? asi me anuncio! xD

    ResponderEliminar
  16. Me encanto!!!
    Al principio crei que estaba loca... pense que ya lo habia leido, Seth de nuevo herido?... pero nop, jaja
    Me encanta eso, aunque sean oneshoot guardan algo de relacion entre si....
    Y bueno, que decir del don de Nessie, parece que Jake se aprovecho un poquito, no? jajaja

    ResponderEliminar
  17. ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh pero que perfecto naty! hahahahaha cuando otro? XD estuvo buenísimo naty, de verdad que excelente =P
    estuvo buenisima la idea del don de nessie xD y Jake hahaha muy buena de verdad... tienes mucha imaginacion y mucho libido xD

    ResponderEliminar
  18. ke bueno ke yo ya tnego mi jake, porke si no la vida seria muuuuy aburrida XD

    te kero kokorito!!! y Naty!! son maravillosas!!!

    ResponderEliminar
  19. nena cullen:koko estubo genial como jeko la depierta de sussueños para el eres genial lo cambies nuca muchos aulledos para ti preciosa y te quiero ver que te cuidas mucho por tu peke preciosa aaaaaaaaauuuuuuuuu

    ResponderEliminar

Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...