viernes, 11 de septiembre de 2009

Inevitable por Jazzy W "Cap 04"


Disclaimer: Todos los personajes le pertenecen a Stephenie Meyer y la historia de mi amiga Jazzy W.

El amor es invisible, entra y sale por donde quiere, sin que nadie pida cuenta de sus hechos.

Miguel de Cervantes Saavedra

No hay disfraz que pueda largo tiempo ocultar el amor donde lo hay, ni fingirlo donde no lo hay.

François De La Rochefoucauld

Capitulo 4

SUEÑOS O PESADILLAS

****Bella caminaba entre troncos y arbustos, adentrándose en el bosque, era apenas el amanecer, había algunos lugares entres sombras aun y la rodeaba una húmeda neblina, se paro en medio de dos grandes árboles, estaba comenzando a sentirse exhausta, apoyo la mano en uno de ellos y cerro los ojos, inhalo y exhalo varias veces hasta que su respiración fue controlada, aun con los ojos cerrados sintió un sobresalto cuando dos marmóreas manos la tomaron por la cintura, acercándola a un duro pecho, sintió una respiración cerca de su oído y cuando se disponía a girarse sintió una boca rozar el lóbulo de su oreja derecha… -No te muevas, confía en mi-, hablo una voz aterciopelada.

Ella sabia que lo lógico seria ignorar esa orden girarse, encararlo, o en ultimo caso correr, pero estaba demasiado inmersa en la sensación de la respiración de aquel desconocido sobre su piel que no pudo mover ni un solo dedo. De pronto no pudo ver más, el hombre había puesto sobre sus ojos una mascada negra de un fino material, la anudo detrás de su cabeza, bajo sus manos rozando su nuca y cuello para finalmente llegar a sus hombros.

¿Quién eres? —Bella pregunto en un susurro aun sin moverse.

El no respondió y en su lugar aparto su cabello de la parte derecha de su cuello y deposito un lento beso. Ella jadeo ante la sensación, pero trato de controlarse.

¿Te conozco? —volvió a preguntar en un tono mas impaciente.

-Si-, susurro en su oído.

El corazón de Bella empezó a latir con fuerza, quería verlo, quería saber quien era ese hombre.

-Entonces déjame verte-, dijo con firmeza, pero cuando se disponía a levantar las manos para quitarse la mascada, las manos del desconocido fueron de su cintura a sus muñecas, impidiendo que se destapara los ojos.

-No, mi amor aun no-, le dijo el volviendo a poner las manos de Bella a sus costados.

Su corazón latió con fuerza cuando el La giro y la atrajo hacia si con sus labios casi pegados a los suyos.

-No es necesario que me veas aun, basta que sepas que soy el único que deseas que haga esto…-dijo con voz ronca rozando sus labios.

El beso de ese hombre no fue tímido, fue supremo, buscando su alma, el tipo de beso que baja como un relámpago hasta los dedos de los pies y vuelve a subir arrasándolo todo a su paso, tocando todos los puntos correctos. Le temblaron los muslos, se le contrajo el estómago y le dolieron los pechos de tanto desear que la acariciara.

Las manos de Bella se posaron en su pecho en busca de apoyo. Ella sintió el firme pecho de aquel hombre que solo se cubría con una camisa abotonada, Bella comenzó a sentir que su pulso aumentaba y su vientre bajo palpitaba con fuerza, mientras su lengua danzaba con la del desconocido. El tiro de su cintura acercándola mas a el.

En el silencioso bosque solo se podían distinguir sus corazones latiendo conjuntamente, hasta volverse en un ritmo irregular.

Él deslizo sus manos más abajo de sus caderas y la apretó aun más, ella puedo sentir su erección aun con la ropa interponiéndose y no pudo controlar el hormigueo de sus pechos mientras el calor que sentía la empapaba.

Me encanta tu sabor —dijo el con voz áspera mientras sus labios rozaban el borde de su mandíbula y bajaban aún más. Besó el hueco de su garganta y se dirigió al punto sensible que tenía justo bajo su oreja izquierda.

Un calor líquido la recorrió toda entera. La dolorosa sensación la hizo gemir y frotarse contra él, buscando una liberación a esa pulsante presión. Las manos de Bella viajaron a su cabello, enroscando sus dedos entre los mechones, no muy largo pero si un poco mas que el típico corte de hombre.

Podría decir lo mismo de ti —respondió con un suspiro cuando la boca de el rozaba su garganta.

En respuesta, él deslizo una pierna entre sus muslos, la apretó contra su sexo, y soltó un gruñido de satisfacción.

-Tu aroma me seduce mas de lo que te imaginas-, dijo el arrastrando su lengua por su garganta.

-No tienes idea de lo que provocas en mí-, siguió.

Bella sonrió ante sus palabras y jadeó de placer cuando él posó sus dientes suavemente sobre su cuello, apretándola hacia el con más fuerza y frotando su largo y musculoso muslo contra su hendidura mientras la levantaba con su pierna.

Ella dejó escapar un sollozó ante la gloriosa fricción, asombrada de que él supiera que hacer para conseguir que su cuerpo gimiera. Oyó como el frío viento se agitaba a su alrededor, pero Bella no lo notó, su cuerpo se consumía con su propio fuego interior.

Él dejó de moverse y la sujetó contra su pierna, apartada del suelo, al borde del orgasmo, completamente a su merced. ¡Dios! Le habría suplicado si hubiera tenido que hacerlo.

Acéptalo mi amor...-

Bella trato de controlar su respiración, pero solo salieron jadeos de su boca.

-Tu me amas tanto como yo a ti-, dijo antes de tirar de ella hacia arriba con su pierna, haciéndola ruborizarse contra su pecho.

Ella gritó y se le disparó la presión de su sangre cuando su cuerpo se convulsionó por la fuerte embestida de su orgasmo.

Bella se abrazo a su cuerpo mientras el la sostenía dejando sus pies en el suelo lentamente…

-Quiero verte-, le dijo ella con un tono desesperado apenas controlando su respiración.

-Entonces hazlo mi amor-, dijo el con su frente apoyada en la de ella. Bella sintió como el la rodeaba con los brazos y empezaba a desanudar la mascada, cuando sintió que la tela caía de su cara todo se volvió negro…*****

Me incorpore de la cama de un jadeo, bastaron unos pocos segundos para darme cuenta lo que sucedía, pase mi vista por todo el cuarto buscando al hombre de mi sueño, desee desesperadamente que estuviera allí, que terminara lo que había empezado, pero al darme cuenta de lo absurdo de la situación me tumbe de nuevo en la cama. ¿Por que había despertado?, esto era una tortura, yo nunca tenia esa clase de sueños y ahora que lo tengo solo a mi me tocaba despertarme antes que le hubiese quitado la ropa y el a mi. Me ruborice ante mis pensamientos, moví la cabeza en señal de negación, un sueño no podía ponerme en ese estado, y menos cuando nunca le pude ver su cara, aunque su voz, su cabello, su cuerpo me resultaran tan “familiares”.

Estuve dando vueltas en la cama sin poder volver a dormir, estaba demasiado “frustrada”, mire el reloj que se encontraba en el buró y que marcaba las 3:30, mañana era viernes y tenia que ir a trabajar, si no lograba conciliar el sueño amanecería con unas ojeras dignas de cualquier muerto, me levante de la cama para ir por un vaso de agua, quizás un te, algo que me ayudara a tranquilizarme y tratar de dormir, pase por la habitación de Edward, estaba cerrada, obviamente a estas horas de la madrugada. El departamento estaba completamente obscuro, no me moleste en iluminarlo, me serví un vaso de agua y me senté en el desayunador, me tome el vaso de agua, para después llevarme las manos a la cara y suspirar, ¿Qué significaba el sueño?, ¿Por qué no le podía ver la cara, hubiera dado lo que fuera por haberlo visto?, ¿Por qué yo parecía tan “deseosa” como el?, volví a suspirar y deje que mi cabeza se apoyara sobre el desayunador, así estuve unos minutos hasta que me sobresalto la luz de la cocina, recargado en la pared cerca del interruptor estaba mi hermano, con sus brazos cruzados sobre su pecho.

-No puedes dormir, o eres alguna clase de vampiro-, me pregunto dándome una media sonrisa, pero sus ojos estaban distantes.

-Solo tuve un mal sueño-, le dije, no quería mentirle a Edward pero no podía decirle que era justo lo contrario y que ese era el problema, había sido la mejor sensación de mi vida, eso solo un sueño.

No dijo nada se quedo en su misma posición viendo hacia la pared, quizás se había dado cuenta que le mentía, no era uno de mis puntos fuertes, pero no parecía molesto mas bien incomodo, tenso… de pronto me di cuenta, el tampoco estaba durmiendo.

-Y que me dices tu, ¿vampiro??-, trate de bromear y el solo me regalo una de mis sonrisas, se separo de la pared, camino hacia mi y se sentó enfrente.

-¿También un mal sueño?-, pregunte. El recargo sus codos en el desayunador y sus manos taparon su cara.

-Ojala hubiera sido malo-, susurro con la cabeza entre sus manos, contestando mas para si mismo que para mi. Sabia a lo que se refería, sonreí ante su expresión, pero me tense al comprender lo que había dicho, si su sueño no fue malo, estaba despierto por la misma razón que yo: “frustración”, mi mente empezó a formular mil preguntas y mi estomago se contrajo, Edward había soñado con una mujer que le quito el sueño, sentí una rabia difícil de controlar, ¿Quién era?, ¿Cuándo la había conocido?, ¿La conocía yo?, trate de controlarme, desde que volvimos de Forks, no podía evitar reaccionar de esa manera ante algo que me recordara que el algún día conocería a “la mujer de sus sueños”, al parecer mas pronto de lo que yo pensaba.

Suspire y levanto la cara de sus manos, me miro pero no dijo nada, se paro y se sirvió un vaso de agua. Había pasado una semana desde la visita a nuestros padres y siempre trataba de no darle importancia a esas reacciones inexplicables sobre mi hermano, pero esta noche era demasiado, entre el hombre de mis sueños y Edward podían matarme los nervios, me pare y fui hacia mi hermano que se había vuelto a sentar, me acerque y le dio un beso en la mejilla, lo sentí tensarse al instante, eso no lo esperaba, jamás reaccionaba así.

-Creo que tratare de dormir, buenas noches-, le dije y me aleje todavía confundida por su reacción.

Le oí decir un “Descansa” mientras salía de la cocina. Trate de dormir lo que restaba de la noche, sin mucho éxito, y como era de esperarse por la mañana no tenia un aspecto muy agradable, me duche y cambie, seque mi cabello, finalmente me mire al espejo, recordé mis noches en la universidad, las “únicas noches de desvelo ” en mi vida.

Me dirigí a la cocina para prepárame una gran taza de café y poder ir al trabajo un poco mas repuesta.

Edward esta sentado en el desayunador, listo para irse a trabajar, tomaba una taza de café, con la vista perdida, cuando entre a la habitación, se volvió hacia mí y me regalo una sonrisa.

-Prepare café, hermanita-, me dijo aun sonriendo.

-Es por lo que te quiero-, le dijo a forma de broma.

Me alegro que dejáramos de lado nuestra pequeña conversación de la noche anterior, quería pasar por alto mi extraño sueño, y aunque quisiera saber quien era la mujer que capturaba lo suyos, si el quisiera decirme, yo ya lo sabría, después de todo todos tenemos secretos.

-Puedo pasar por ti hoy para comer, me recomendaron un pequeño restaurante de comida italiana-, le dije mientras el enjuagaba la taza que antes había usado.

-Será un placer-, dijo mientras secaba sus manos.

Se puso su saco y tomo su maletín, si yo hubiera tenido profesores así, llevaba unos pantalones de mezclilla, una camisa y ahora el saco, se veía formal pero casual, para nada un típico maestro, le sonreí mientras tomaba sus llaves.

-Entonces esperare por usted a la hora de la comida señorita-, me dijo dándome un beso en la mejilla, que me hizo volver a sonreír y salio.

Mire hacia donde el había estado hace unos momentos y moví la cabeza lentamente mientras terminaba mi café. Recordé las palabras de Alice la primera vez que le conté que Edward viviría conmigo, “Prepárate para la ropa sucia, la comida por todas partes, los intentos de fiesta, y tus intentos por mantener tu casa en pie”, me dijo, aunque creo que eso tenía algo que ver que Emmet fuera su hermano. Para ser sincera estaba muy feliz viviendo con Edward, era ordenado, limpio por decir lo menos, divertido, amable, caballeroso, todo lo que ya era cuando niños con la madurez sumada por los años. Me encantaba pasar tiempo con el, cocinando, viendo películas, escuchado música, viéndolo tocar. Quizás por eso mis reacciones tan descontroladas ante la idea de que se marchara, pero no le daría mas vueltas al asunto, solo me limitaría a disfrutar a mi hombre perfecto, mi hermano.

El día paso mas rápido de lo que esperaba, la comida estuvo deliciosa y el lugar le encanto a Edward, el fin de semana llego y con ello unos de los días mas divertidos de mi vida, aunque también un poco dolorosos, mi “querido” hermano tuvo la fantástica idea de ir a patinar al parque el domingo por la mañana, claro…, el patinando se veía como un jugador de jockey en ropa casual con la elegancia de un patinador profesional, mientras yo era peor que la primera vez que le enseñan a andar a los niños con patines de cuatro ruedas, caí unas cuantas veces pero siempre menos dolorosas de lo que pudieran ser ya que Edward recibió las peores partes, y aun así parecía divertido.

Otra semana comenzó iniciado así lo que parecía se transformaba en nuestra rutina diaria, algunas cosas se iban haciendo casi automáticas en nuestra forma de vivir, nos estábamos acoplando sumamente bien viviendo juntos. Solo había un pequeño detalle que no compartía con nadie, ni siquiera con Edward, mis sueños seguían traicionándome, desde al pasado viernes todas la noches tenia al mismo hombre en mi cabeza aquel que no podía verle el rostro, aquel que me hacia sentirme deseada, amada y frustrada de múltiples formas, el sueño siempre terminaba antes que pudiera verlo, eso me dejaba la cabeza vuelta loca. Cinco días despertándome a media noche con ganas de que el estuviera en mi habitación y no dejarlo salir hasta que pagara por todos los intentos frustrados.

Sonreí por mis pensamientos con un hombre que no existía. Edward tenia una junta con los directivos del Instituto para presentar su nuevo proyecto así que no saldría de allí hasta que todos aceptaran la propuesta, lo convencí de que podría quedarme en la oficina para adelantar algunos pendientes y así cuando el se desocupara poder cenar juntos un poco mas temprano, por el mensaje que me había mando hace unos momentos parece que todo estuvo bien y solo tenia que quedarse a ajustar unos detalles, yo estaba segura que los convencería, sus ideas son muy buenas.

Me sobresalte al escuchar el timbre de mi celular, sonreí al saber de quien se trataba...

-Hola Alice-, salude a mi amiga.

-Hola “Amiga paso todo el tiempo con mi hermano”-, dijo ella en un tono fingido de molestia. Aunque tenía algo de razón hace más de una semana que no la veía y eso para Alice ya era mucho.

-Solo ha sido una semana, Alice-

-El tiempo no importa tontis, que no ves solo falta 10 días para mi boda y quiero pasar tiempo con mis amigas-, se casaba el próximo viernes por la noche, ella y Jasper estaba impacientes.

-Si lo se Srita. “No puedo dejar de mencionar mi boda”-

-Jajá jajá, eso seria imposible, bueno Bells solo te llamaba para avisarte que los vestidos ya están listos puedes pasar por el tuyo cuando quieras-

-OK, pasare mañana-

-Haz hablado con Rose-, pregunto

-Hable con ella ayer, quieres que le avise-

-No déjalo yo lo hago, tal vez nos pongamos de acuerdo para salir y te aviso-

-Cuenta conmigo, futura Sra. Hale-, le dije

-Bella, no le hagas esto a mis nervios, te llamo después, cuídate-

-Bye Alice-, me despedí con una sonrisa.

Estaba muy feliz por ella, estaba segura que había encontrado la felicidad para siempre, dos almas gemelas siempre lo son.

Apenas terminara la planificación de las exposiciones del próximo mes del Centro Cultural podría irme a casa y ver a Edward, tenía una sensación extraña por no haberlo visto hoy al medio día. Quería que me contara todos los detalles sobre la junta.

Oí abrir la puerta de la oficina mientras le daban unos pequeños golpes, levante la vista ante la acción.

-Se puede preciosa-, pregunto Mike desde la entrada, no le respondí, no esperaba verlo aquí.

A el pareció no importarle mi silencio, entro y cerro la puerta tras de si con una sonrisa “galansesca” en su rostro.

-Me extrañaste, hace días que no se nada de ti-, pregunto mientras se acercaba a donde yo estaba.

Me pare del sillón y quede a su altura mientras se acercaba, se dispuso darme un beso pero gire la cara para que sus labios rozaran mi mejilla.

-Pasa algo Bella-, pregunto confundido

-Mike creo que deberíamos hablar-, le dije mientras me sentaba de nuevo en el sillón, sabia que debía haber hablado con el antes sobre la decisión que tome acerca de nuestra “semi-relación”, pero al no saber nada de el por días pensé que quizás había desistido.

-Si desde luego-, y se sentó en el sillón a mi lado, -No sabes que ganas tenia de verte- dijo acercándose mas a mi, yo solo retrocedí un poco mi cuerpo.

-Mike creo que seria mejor que salieras con alguien mas, la verdad yo no quiero una relación en estos momentos, lo...lo siento-, le dije con todo la firmeza que pude.

-¿Quee?-, pregunto burlón

-No quiero seguir viéndonos, no quiero una relación-, le conteste

-Por favor Bella, se que te gusto y yo no estoy pidiendo precisamente una relación-, mis ojos se abrieron como platos al escucharlo, pero no tuve tiempo de reaccionar pues sus labios estaban sobre los míos y una de sus manos sostenía mi cabeza que me impedía alejarme.

Ese “beso” era la sensación mas desagradable que había tenido en mi vida, mientras su lengua seguía intentando que le diera acceso a mi boca.

De pronto en mi cabeza solo visualizo a una persona: Edward. Deseé que estuviera aquí, me sentía segura y protegida a su lado, desee que alejara a Mike, estar riendo con el y no en esta incomoda situación. En segundos mi cabeza voló hacia el hombre de mis sueños, hacia el momento en que el me desataba la mascada, en el momento que todo se desvanecía, puede por fin ver quien era, en frente de mi con su frente contra la mía y jadeando como yo lo hacia en el sueño estaba el, mi hermano, tan glorioso como siempre pero mirándome de una forma que me gusto mas de lo que debería, solo eso basto para sacar fuerzas de no se que lugar y apartar a Mike, me levante lo mas rápido que pude y abrí la puerta de la oficina.

-Sal ahora mismo de mi oficina, no te quiero volver, me oyes-, le grite con las lagrimas arremolinándose sobre mis ojos.

-Bella…-,

-Vete o llamo a seguridad-, le volví a gritar, levanto las manos en señal de burla y se paro del sillón, camino hacia mi y antes de cruzar la puerta se volvió de frente mío...

-Tú te lo pierdes preciosa-, dijo encogiéndose de hombros y se fue.

Cerré la puerta detrás y apoye mi espalda en ella, deje que las lagrimas corrieran, mi cabeza daba vueltas sin sentido entre todos los pensamientos que cruzaban dentro de ella. Estuve así varios segundos hasta que pude moverme, seque un poco las lagrimas de mis mejillas y camine hacia el escritorio, guarde mis cosas, apague la computadora, tome mis cosas y salí de la oficina, me despedí de Ángela que apenas llegaba de la comida, me pregunto si estaba bien, solo le dije que me sentía un poco cansada y que me iba a casa, basto para que no hiciera mas preguntas.

Cuando subí al coche suspire y cerré mis ojos esperando que todo fuera un mal sueño pero los abrí para encontrarme en el mismo lugar.

Arranque y salí de estacionamiento casi por inercia pero conforme iba transitando por las calles rumbo a casa los pensamientos se iba aclarando. Había soñado con Edward todas estas noches, lo deseaba con todas mis fuerzas, no soporte el beso de Mike por pensar en el, solo quería que el lo hiciera, lo había extrañado tanto hoy solo por no haberlo visto a al hora de la comida, mi corazón latía con fuerza ante la verdad que ya era evidente.

Sacudí mi cabeza mientras limpia las lagrimas que comenzaban a caer de nuevo por mis mejilla, no podía ser, debía estar loca, que demonios estaba pensando al permitirme sentir esto, era una tontería….pero entre mas lo negaba mas sentía mi pecho oprimirse, la única verdad es que lo amaba completamente, amaba cada cosa de el, su personalidad, su alma, su forma de ser conmigo, su perfecta presencia, esta perdidamente enamorada de Edward, de mi hermano. Tal revelación hacia las lagrimas incontrolables, reprobación, pena, dolor ante lo que jamás seria inundaban mi cuerpo.

Llegue al departamento casi sin darme cuenta, aparque y subí de forma mecánica, al entrar a casa me di cuenta que el aun no estaba, suspire de alivio, por primera vez no queria verlo, no en ese momento. Camine hasta el cuarto de entretenimiento donde estaba su piano, deslicé mi mano por el gran instrumento y me senté en el banco frente a este, no pude mas…deje caer mi cabeza en mis brazos apoyados sobre el piano y llore por todo.

Mi amor era prohibido e inalcanzable, me senti morir al saber que mi sueño no sucedería nunca, jamás podría estar con el hombre que me hacia sentir tanto.

Deje escapar un sollozo mientras me limpiaba un poco las lágrimas de nuevo.

-¿Bella?-, oí su voz con un buen tono de preocupación en ella, ni siquiera lo había escuchado entrar. Trate de calmarme y limpiar mi cara lo mejor posible.

-Quien mas si no?-le conteste aun sin girar a mirarlo.

No contesto pero cuando sentí su presencia más cerca de mi cuerpo supe que se había acercado. Se sentó en la parte libre del banco y susurro,-Bella, ¿Qué tienes me estas asustando?.

No respondí, -Bella-, insistió en un tono mas impaciente.

Levante la cara para encontrarme con sus ojos verdes opacos por el desconcierto que debía sentir.

-Bella, háblame que paso-, me dijo mientras sostenía mi mentón con una mano. Ese pequeño toque me quemaba, era las mismas sensaciones siempre que me tocaba pero se intensificaban en sobre manera ahora que entendí su causa.

No pude mas y lo rodee con mis brazos, quería que me protegiera del sufrimiento, del dolor de mi misma y mis sentimientos, que ironía, si todos eran para el.

El me abrazo con fuerza lo cual me reconforto, cuando logre calmarme, volvió a preguntar la causa de mi estado, jamás le diría la verdad, le conté sobre Mike y su inesperada visita, Edward se puso tenso y sus ojos se obscurecieron por la rabia que parecía apoderarse de el, me limita decirle que no había pasado nada que no pudiera controlar, que solo me había tomado desprevenida.

El me volvió a abrazar fuerte y completamente tierno a la vez…

-Tranquila, hermanita, el verdadero hombre que se merezca tu hermoso corazón llegara, no necesitas de nadie que no este a esa altura-, dijo en un susurro, aun con el tono de voz lleno de resentimiento.

Quizás amar a Edward era una prisión a mi corazón, pero alejarme de el seria mi muerte, así que solo asentí y me quede en sus brazos hasta que el sueño me venció, la verdad que me había golpeado esta tarde se iría conmigo a la tumba, seria mi obscuro secreto, el mas bello y mas doloroso de todos.

Quedate un momento así,
no mires hacie mi que no podré aguantar
si clavas tu mirada que me hiela el cuerpo
me ha pasado antes que no puedo hablar.

Tal ves pienses que estoy loco
y es verdad un poco tengo que aceptar
pero si no te explico lo que siento dentro
no vas a entender cuando me veas llorar.

Nunca me sentí tan solo
como cuando ayer de pronto lo entendi mientras callaba
la vida me dijo a gritos
que nunca te tuve y nunca te perdi y me explicaba
que el amor es una cosa
que se da de pronto en forma natural lleno de fuego
si lo forzas se marchita y sin tener principio llega a su final

Ahora talvés lo puedas entender
que si me tocas se quema mi piel
ahora talvés lo puedas entender
y no te vuelvas si no quieres ver

Que lloro por ti
Que lloro sin ti
que ya lo entendi
que no eres para mi
y lloro...

La cancion: Que Lloro, de Sin Bandera.

18 comentarios:

  1. Ahhh!! Dios!!! El protagonista de los sueños eroticos de Bella es nada mas y nada menos que...

    EDWARD, SU HERMANO!!!!

    Ahh!!!! Soy yo o no se si notaron ke Edward estaba celoso por lo ke Bella ke conto de Mike...

    Ahh!! se viene lo mejor chikas!!!

    Se ke dije ke los viernes subiria por partida doble, porke me urge ke lleguen a los mejor... y les aseguro ke asi sera... Pero hasta la noche... Uno tempranito, y otro en la nochecita...

    AHH!! Comenten chicas!!! Es mi fic favorito y kero ke todas lo lean!! para ke mi Jazzy este feliz de ver sus Comments!!!

    Las amo!!

    Kokoro Black
    NTLS - Santa Lemmon

    ResponderEliminar
  2. Por DIOSSSSSSSSSSSSSSS!! No puedo esperar hasta la noche por el otro capi, PLEASEEEEEEEEEEEEEEEEEEE no sea malita ponlo por la tarde, solo esdpero que haya un cambio en todo esto para que se queden juntos, me explico, que no sean hermanos de verdad, jajaja, tu sabes, sorpresitas, cuidate, eres fenomenal

    ResponderEliminar
  3. porrr dios esta buenisimo
    ya me muero de ganas por el otro capi
    ya quisiera tener un hermano como edward
    espero que se puedan quedar juntos.=) cuidate besos

    ResponderEliminar
  4. CRUEL ESO ERES U.U ..no puedo creer k me hagas esto :( tu ya te sabes la historia y me dejas sufriendo hazta la noche .. = te adoro preciosa y me tocara esperar .....nooooooooooooooooooooooo quiero llorarrrrr gracias " amiga ya me se como va esto " jajajaja ..besotes a todas las NTLS

    ResponderEliminar
  5. dios miooo
    por favor que algo suceda para que ese amor tan grande se pueda llevar a cabo..
    y sii es mas que obvio que edward tambien siente lo mismo por bella jeje
    mm que mala no podre ver el siguiente capi hasta el lunes... puchaa
    saludithos

    ResponderEliminar
  6. Dioos! preciososo! me encanta escribes genial y.. aaaah!! esta historia es apasionante! no puedo esperar el siguiente cap! *-*

    ResponderEliminar
  7. Bien ya vamos llegando al asunto. Está super, espero con ansia que llegue la noche. Grrrr habrá hoy luna llena?. Besote miles para mis NTLS

    ResponderEliminar
  8. POR DIOSSSSSS QUE PASA? NO SE SI ES MI IMAGINACION PERO EDWARD ESTABA SOÑANDO LO MISMO QUE BELLA? QUE OCURRE? NO SEAS MALA SUBE YA EL CAPITULO ME ENCANTA.

    ResponderEliminar
  9. seguro soñaron los mismooooo!!! por favor!!!
    que no sean hermanos y puedan "concretar"!!!
    chicas.. me hicieron amar el lemmon.. jajaja

    ResponderEliminar
  10. ya es de nochee i todavia no estaa¬¬

    ResponderEliminar
  11. wow!!!!!
    este sinceramente es mi fic favorito....
    y eso es porque.....
    ami me paso algo parecido...
    SIIII......

    Cuando tenia 13 estaba "enamorada" de mi primo que era como mi hermano y además mi más fiel amigo..

    Sufri muchisimo.... celos por su novia....... mi primer amor era un amor imposible...


    Es por esto que AMO CON TODAS MIS FUERZAS ESTE FIC.
    Sigue publicando que te esperaré

    ResponderEliminar
  12. a que hora de la noche????

    ResponderEliminar
  13. Koookoro estoy de acuerdo contigo hay que comentar mmmmmuuucho para que Jazzy este feliz ya que se lo merece!!

    Es la primera vez que le dejo Comentario pero que ni piense que no lo he leiiido.. esta GENIAL!! JAZZYY MEEE ENNNCAAAANNNTTTTAAAAA...!!!

    Por diiioos... SU HERMANO!! wwwoooww......

    Quiero leer el siguiiiiente YA!!
    Kokoro no seas mala y subeee el capiii jajajajaja xD

    JAZZYY SIGUE ASIIIIII......!!!

    ResponderEliminar
  14. ah!! diooos!! edward!! hahaha!!! el chico del sueño!! jejej me encanta!! ya no me pierdo el otro hahaha voy leer!! quiero saber que suceder!! hhahha enserio me encanto =D me gusta ese sueño!! y si edward esta mas que celoso!!! xoxo se te quiero kokoro que dios te bendiga amor y te ilumine!! salu amor y paz

    ResponderEliminar
  15. OMG OMG OME OME!!! aaahh
    kokooooo te amoo gracias por subier este fic lo estoy amandooo
    JAZZYYYY eres una Diosa cariñooo!

    ResponderEliminar
  16. es una pasada me encanta, saludos y besos desde españa

    ResponderEliminar

Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...