lunes, 7 de septiembre de 2009

Inevitable por Jazzy W "Cap 02"


Disclaimer: Todos los personajes le pertenecen a Stephenie Meyer y la historia de mi amiga Jazzy W.

Capitulo 2

RESCATANDO LO QUE ME PERDI

-Bella soy yo….-pero eso ya lo sabia de repente todo lo que había pensado en decirle se borro y lo abrace con fuerza….-te extrañe-me dijo al oído haciendo que se me erizara la piel.

-Pero ya estas aquí…-le conteste.

-Si intentando rescatar mi promesa Bella- se limito a contestar……

Me separe un poco para poder ver la cara de mi hermano, estaba sonriendo y solo pude hacer lo mismo sin pensarlo. -Hola, Edward-le dije con la voz un poco entrecortada.

-Hola, Bella- me miro a los ojos unos segundos mas hasta que desvío la vista hacia las personas que recogían su equipaje, haciendo que saliera de nuestra pequeña burbuja.

-Será mejor que vayamos por el equipaje-, dijo al momento que me tomaba la mano haciendo que mi corazón, saltara recordándome que el era real. Me limite a asentir con la cabeza.

Edward no traía mucho equipaje, dos maletas de tamaño mediano que el cargaba en cada brazo sin dificultad y yo solo ayude con una maleta mas pequeña y una mochila a un costado.

Caminamos por el estacionamiento en silencio, hasta que me pare frente mi auto, deje la maleta pequeña en el suelo, y busque mis llaves en el bolsillo de mi pantalón, cuando logre sacarlas levante la cabeza y vi a mi hermano que también había bajado sus maletas y me miraba con una gesto de diversión.

-¿Un Mini Cooper?-pregunto mientras se formaba su sonrisa torcida que tanto extrañaba.

-Si hay algo de malo en eso-pregunte confusa.

Se encogió de hombros-No solo esperaba /reencontrarme con Mr. Rex-.

Yo solo me limite a rodear los ojos, no esperaba que saliera con eso, que lo recordara.

Mi papa había enseñado a manejar a Edward desde los 13 años, y un año después el me comenzó a enseñar a mi, fue de las ultimas cosas que hicimos juntos y aunque papa no nos dejaba utilizar el auto nos permitía practicar fuera de la ciudad en las cercanías de nuestra casa con Mr. Rex, así le llamábamos a una vieja camioneta roja propiedad de mi padre, fue su primer auto, y la conservaba con cariño pues decía que le ayudaba a recordar que todo cuesta trabajo.

-Lo siento el doctor le prohibió los viajes largos-, le sonreí mientras abría la puerta trasera y subíamos las maletas.

-Es una lastima tendremos que ir a visitarlo, aunque justamente ahora estoy mas preocupado de subirme contigo a este auto- dijo cruzando los brazos después de que cerráramos la puerta trasera de mi auto.

-¿Y eso por que?-Le dije riéndome ante su falsa postura de hostilidad

-Bella, al menos Mr. Rex nos protegía un poco, era duro de roer, pero ahora, como esperas que me suba a un auto como este con una personita a la que le es difícil coordinar sus pies aun en el suelo-dijo volviendo a sonreír de mi forma favorita.

-Muy gracioso hermanito pero te recuerdo que no deberías bromear a la única persona que sabe donde vas a vivir o si-, le dije mostrándole las llaves, el solo se río bajito y se limito a decir-Touche, tu ganas y que dios se apiade de nosotros-volteo a ver al cielo en forma dramática y no pude contenerme de sacarle la lengua.

Salí del estacionamiento tomando el camino a mi departamento, Edward iba mirando por la ventana con una cara propia de cualquier turista como si no quisiera perderse ningún detalle de la ciudad donde viviría, pasaron unos segundos mas hasta que volteo su rostro hacia mi y comenzó a hablar.

-Alguna otra razón para escoger Phoenix como residencia hermanita, claro a parte del hecho de no querer pasar desapercibida con tu piel nívea entre tantas personas bronceadas-.

No me paso inadvertido su sarcasmo, otra cosa que de verdad extrañaba de el, era sumamente fácil y divertido hablar con Edward.

-No ninguna, la verdad es una idea fantástica para llamar la atención, ya sabes siempre he soñado con los reflectores sobre mi-conteste sonriendo mientras paraba el coche cuando nos toco un rojo del semáforo.

-OK, veo que no has perdido tu agudo sentido del humor, pero ya hablando en serio hay algún ¿por que?- Me dijo mientras arrancaba nuevamente el auto, me limite a contestarle de forma automática con la clásica respuesta que tenia memorizada en la cabeza desde el primer día que le dije a mis padre que estudiaría aquí, y que salía de mi boca cada vez que alguien me interrogaba con eso.

-La Universidad tenía un plan de estudios muy bueno para la Carrera de Logística y Planificación, además de uno de las mejores complejos culturales que ha ido creciendo año con año, en el cual trabajo actualmente, además de ser una ciudad de verdad tranquila- le dije lo mas tranquila que pude, restándole importancia.

Sentí su mirada unos segundos sobre mi hasta que se volvió nuevamente a la ventana y suspiro por lo bajo,-Quiero tu respuesta Bella, no la que tu cabeza tiene registrada-, dijo sin mirarme todavía, y ahí estaba yo en mi auto con la única persona que había logrado distinguir que esa era una respuesta elaborada que tenia el propósito de esconder mis verdaderos motivos, mis verdaderos sentimientos.

Suspire resignada, -Quería alejarme de Forks, alejarme de los recuerdos, quería un lugar que no me recordara mi antigua casa, mi antigua vida, que no me recordara a ti-, termine en un susurro, le había contestado con nada mas que la verdad, se merecía al menos eso después de haberme descubierto en la mentira que yo llevaba sosteniendo tanto tiempo.

Su rostro se giro hacia mi, su expresión era de tristeza y dolor-Lo siento Bella, siento mucho que hayas sufrido por mi culpa, no te preocupes no te causare muchas molestias, será solo por un tiempo-, al oírlo mi cuerpo se tenso completamente, no podía estar hablando en serio, acabábamos de reencontrarnos y el ya estaba hablando de irse, no definitivamente no lo iba permitir, ya no importaba el pasado solo importaba que mi hermano estaba de nuevo conmigo, como antes, como siempre.

Di la vuelta en una calle poco transitada y orille el auto, lo apague, me quite el cinturón y me volví hacia el.

-Que ahora me vas a cortar en pedacitos como venganza-, sonrío al decirlo pero la broma no le llego a los ojos que estaban cargados de tristeza.

-Edward-lo llame y el levanto la cara-Los dos ya sufrimos demasiado, nuestros padres también, fuimos unos niños que no pudieron asimilar un cambio en sus vidas, y al hacerlo alejamos a las personas que mas amamos-hice una pausa, sus ojos estaban clavados en los míos.

-No quiero sepárame de ti nuca mas, me oyes, que hayas venido a Phoenix es lo mejor que me ha pasado en estos años-se lo dije sin aparta la mirada, acercándome mas a el, nuestras frentes se tocaron y pude sentir su respiración.

-Te extrañe tanto hermanita-dijo acariciándome la mejilla y yo solo me limite a rodearlo con mis brazos.

-Solo prométeme algo-dije a su oído, el asintió con la cabeza-Esta es la primera y ultima vez que tocamos el tema, no pienso desaprovechar ni un segundo mas hablando del pasado me entiendes-, el volvió a asentir con la cabeza, nos separamos con una media sonrisa en nuestros rostros y volví a encender el coche para terminar el camino a casa.

Aparque fuera de mi edificio, los dos salimos y yo me dispuse a abrir la puerta trasera para sacar las maletas, Edward seguía mirando el edificio sin moverse, -¿Pasa algo?- le pregunte, el se giro hacia mi y sonrío moviendo la cabeza negativamente-Nada de importancia solo estaba deseando que no vivieras en el quinto piso, seria muy difícil subir el piano-, dijo tomando las dos maletas que había cargado antes en el aeropuerto.

-En realidad vivo en el 6° piso, pero…-, se paro en seco y se volvió hacia mi, apreté los labios intentando no reírme, -no creo que haya mucho problema o si-su cara hizo una mueca como tratando de reprimir un sonoro grito, en ese momento no me pude contener y me reí mientras pasaba junto a el.

-Vivo en el segundo piso tonto y ya estuve midiendo los espacios, el piano cabe perfectamente-dije mientras subía los primeros escalones.

-Muy graciosa, Isa-Bella-, dijo mientras me seguía por las escaleras enfatizando la primer silaba de mi nombre. Bueno si quería de verdad ser gracioso yo podría seguir su juego...

-Eddie te recuerdo que no has entrado aun a la casa, aun puedes dormir a la intemperie-, le dije agitando las llaves.

-OK, la pipa de la paz Bella-, me gire y seguimos subiendo, cuando abrí la puerta del departamento, lo invite a pasar y cerré la puerta tras de mi.

-¿Te gusta?- le dije mientras caminábamos hacia su habitación.

-Huele a ti, a fresas y rosas,…perfecto-, mi cara comenzó arder solo el podía decir algo como eso de una pregunta tan insignificante. Dejamos las maletas en el cuarto, ya eran cerca de las dos y media de la tarde y pensé que seria oportuno preparar la comida.

-Que te parece si te dejo para que arregles tus cosas y tomas un baño en lo que preparo la comida-, le dije mientras me sentaba a su lado sobre la cama, me encantaba sentirlo cerca, me sentía segura, protegida, feliz.

-Suena bien, pero podríamos pedir algo, no quiero que te sientas obligada….-no lo deje terminar, levante un dedo a sus labios que lo hizo callar, me levante inclinándome a su oído...

-Voy a preparar pasta, todavía te gusta la comida Italiana no??-, por un momento no hizo nada, -Por supuesto-, contesto segundos después, aclarándose la garganta.

Salí de la habitación, y me dirigí a la cocina para preparar la comida, me puse el delantal y agarre mi pelo castaño con una pinza que formaba una coleta en forma de cascada, saque todo lo necesario, comencé a picar los ingredientes para acompañar la pasta, prendí el fuego, mis movimientos eran coordinados, no estaba realmente consiente de muchas cosas que hacia, en ese momento mi mente estaba de un extraño color verde, sonreí al pensar en ese color en ves del clásico “en blanco”, feliz y en paz.

No me di cuenta en que momento Edward entro a la cocina y se recargo en el desayunador viendo mis movimientos, había cocido unas verduras para acompañar la pasta, que en un par de minutos estaría lista.

-Anda que voy a empezar a cobrarle a mi mas ferviente observador-, le dije mientras comenzaba a sacar los manteles, platos y cubiertos, el pareció sorprenderse de que yo lo hubiera notado y se enderezo, me volví hacia el y le sonreí.

-Podrías apagar la pasta en unos cinco minutos mas y poner la mesa en lo que me doy una ducha rápida.- dije mientras me quitaba el delantal.

-Claro, no hay problema

Veinte minutos después ya estábamos comiendo, por suerte la pasta estaba en su temperatura exacta.

-Mama llamo mientras te duchabas-, me dijo el mientras me llevaba el tenedor a la boca. Pase bocado rápidamente y el se río por mi acción.

-Y ¿Qué te dijo?-.

-Te manda saludos, dice que ella y papa están muy contentos y que nos quieren ver lo antes posible, si por ella fuera estaríamos de camino a Forks-.

-Ellos te extrañan mucho-, era cierto mis padres también habían sufrido mucho prácticamente no veían a ninguno de sus hijos.

-Nos extrañan-hizo una pausa y tomo mi mano-Se que nos haz ido con ellos últimamente-, agache la cabeza, era verdad, pero ahora iba recuperar todo el tiempo perdido, no iba a dejar que nadie quien yo quisiera estuviera alejado de mi.

-Y entonces cuando les damos la sorpresa-, levante la cara sonriéndole a mi hermano, que esbozo mi sonrisa favorita en respuesta de forma casi automática.

-Mi mama me pidió que fuéramos esta fin de semana pero la verdad no me apetece viajar ahora mismo, así que le dije que en dos semanas estaríamos ahí-.

-Me parece bien-, poniendo la mano que tenia libre sobre la suya que aun tenia presa mi otra mano.

Cuando terminamos de comer prepare unos cafés y fuimos hacia el cuarto de entretenimiento, el espacio le encanto a Edward y nos tumbamos en el sofá-cama que tenia ahí.

Estuvimos hablando de muchas cosas, poniéndonos al corriente, desde cosas tan triviales como nuestra película favorita de los últimos años, los libros que habíamos leído, nuestra música preferida, etc., no me sorprendió saber que nuestros gustos eran bastante parecidos, claro a excusión de su película, yo no podría encontrar nada atractivo en el Exorcista.

Hablamos sobre mi trabajo como Jefa del departamento de Planificación y Desarrollo del Centro Cultural de la ciudad. Parecía interesado en saber cada detalle y la verdad me encantaba que el supiera todo lo que había pasado en mi vida.

Le conté sobre como conocí a Alice, y después a Emmet, y a los hermanos Hale.

-Me alegro que tengas tan buenos amigos-, me dijo mientras me acurrucaba a su lado

-Los quiero muchos, la verdad son muy divertidos.

-Y algún amigo especial-, sonreí al oír la pregunta de mi hermano, pues uso un tono muy muy de hermano mayor.

-No, bueno quizás, bueno-, levante la cabeza, para verlo con el ceño un poco fruncido.

-Y eso nos deja en…-, pregunto mientras ponía unos cabellos tras de mi oreja.

-He salido una cuantas veces con Mike, un chico que conocí en un lanzamiento de un libro, trabaja con su padre, su familia es dueña de una de las librerías mas importantes de la ciudad-, hice una pausa- aunque siendo de verdad honesta mi “casi novio” rompe mi paciencia, no creo que lleguemos muy lejos-. Volví a bajar la cabeza a su pecho.

-Si no suenas muy entusiasmada.

-Al principio era un poco divertido, pero su pose egocéntrica y material no pasa desapercibida cuando lo conoces mejor-, hice una pausa y caí en la cuenta, yo también quería saber si había alguien en su vida, o si había existido alguien. Recuerdo que cuando Edward tenía 20 mi mama me había comentado que estaba saliendo con una de las hijas del Sr. Denali el amigo de mi padre.

-Y que me dices tu, que paso con Thani???- la realidad es que no me acordaba bien del nombre, no era mi nombre preferido en el mundo cuando mama me contó.

-Tania- corrigió el-Fue mi novia hace algunos años, estuvimos juntos por dos años, pero terminamos- hizo una pausa- supongo que así debería de ser-, lo sentí encogerse de hombros como restándole importancia.

-Lo siento-, le dije acurrucándome mas a el, el deslizo su mano por mi espalda, dándome suaves masajes.

-Yo no, todo pasa por una razón, creo, ahora ella es feliz se caso hace un año con mi mejor amigo Jacob-comenzó a reírse- recuerdo que el día que me dijeron que estaban juntos, los dos estaban sumamente nerviosos, como cuando le dices a tus padres que embarazaste a tu novia-me reí de su comparación y levante la cabeza, parecía estar recordando algo, esbozo una sonrisa que no llego a sus ojos, supongo que aun sentía algo por ella.

No dije nada mas, solo me acurruque sobre su pecho mientras el pasaba sus manos por mi pelo.

Estuvimos así un rato mas, ya había oscurecido y estaba realmente cansada, el día no había sido extenuante pero mi corazón había dado varios vuelcos en el día.

-Deberíamos descansar mañana es Lunes y el trabajo espera-, me dijo el sin dejar de recorrer su mano por mi espalda.

-Si, es cierto. Mañana te dejare en el trabajo a las 9, ¿esta bien?, verdad-, le dije enderezándome, quedando sentada a su lado.

-Por supuesto-, contesto mientras se enderezaba un poco. Se inclino hacia mí, quedando su rostro muy cerca del mío, me dio un beso en la mejilla tocando la comisura de mis labios y susurro- Buenas noches hermanita-.

-Buenas noches hermanito-, nos despedimos para dirigirnos a nuestras habitaciones, como hace muchos años lo hacíamos en Forks. Me fui a la cama y dormí como hace ya mucho tiempo no conseguía hacer, mi corazón estaba completo al fin.

Los días pasaron rápido, Edward estaba muy contento con su trabajo mas de lo que yo me hubiera imaginado, tenia tantos proyectos para la escuela, para sus alumnos, sonreía al ver como sus ojos se iluminaban cada vez que se le ocurría una nuevo plan a realizar, tuve que recordarle varias veces que tendría todo el tiempo del mundo para conseguir todo lo que deseaba, en realidad no lo sabia, pero eso era lo yo quería que pasara, quería verlo cumplir sus sueños y que estuviera ahí con el para compartirlos.

Su horario y el mío se acoplaban muy bien, el tenia unas clases por la mañana los martes y los jueves y una sola por la tarde el viernes, las demás horas del día hasta las 2 las dedicaba a su puesto administrativo y solo tenia que regresar a la escuela por la tarde de ser necesario, yo salía del trabajo para comer de 2 a 4 por lo que comíamos juntos y regresaba a la oficina hasta las 7, hora en que acababa mi jornada, así que cuando regresaba a casa, mi hermano tenia el lugar impecable.

El miércoles había llegado su piano y aunque costo un poco mas de trabajo del que yo me imaginaba, el leal amigo de mi hermano ya se encontraba en la sala de entretenimiento, mi lugar favorito de la casa desde que Edward se mudo.

Después de ese día siempre regresaba a casa para encontrarlo tocando, me encantaba ver pasar sus dedos por las teclas, sentía como si los años no hubiesen pasado.

Casi sin darme cuenta había llegado el viernes, y Edward me recogería en su nuevo auto, después de su clase vespertina, creo que la broma con mi auto tenia algo de verdad, se había comprado un Volvo XC60, se enamoro de el en cuanto lo vio y yo no pude poner alguna objeción, me encantaba como se veía mi hermano en el.

Hoy cenaríamos con mis amigos, ya que Alice había insistido en conocer a Edward lo antes posible después de que el lunes hablara con ella, al ver unos tres mensajes y unas 15 llamadas perdidas en mi celular, se me había olvidado por completo que me llamaría el día que Edward llego.

Estaba acabando de contestar un correo cuando escuche el ruido de la puerta al abrirse, no levante la vista, sabia quien era, sus pasos acompasados y su olor tan exquisito jamás los confundiría, llego hasta mi escritorio, pero aun así no voltee a verlo, se inclino hacia mi con su cara viendo a la pantalla como yo lo hacia, sentía se respiración en mi oído…

-¿Cómo esta mi hermana favorita? –susurro a mi oído haciendo que en mi cuerpo se produciera un temblor casi incontrolable. Se alejo de mí con una sonrisa en el rostro para sentarse en el sillón frente a mi escritorio.

-No están difícil llamar tu atención-, me dijo mientras ojeaba el periódico que había leído yo esa mañana.

-Muy gracioso-, le dije mientras empezaba a guardar mis cosas- Y… ¿Cómo se supone que te escabulliste de Ángela?-

-Y quien te dijo que me escabullí, tu asistente, Ángela, es muy amable solo le dije que era tu hermano y me dijo donde estaba tu oficina-, me dijo todavía con la vista en el periódico, con una sonrisa burlona es su cara.

-No deberías hacer eso sabes-, mi hermano tenia un poder natural desde pequeño para poder leer a las personas y conseguir lo que el quería. Les encantaba a las personas, a las mujeres.

-Hacer que??-pregunto mi hermano con un tono falso de confusión.

-Deslumbrar a las personas, si mi asistente se muere de hiperventilación será tu culpa- le dije mientras le señalaba con el dedo y apagaba mi computadora, Edward dejo el periódico y pregunto curioso-¿Te deslumbro a ti?-.

Pero el ruido del teléfono me impidió contestar, -¿Ángela, que pasa?-, conteste poniendo el altavoz.

-Bella, el Sr. Newton va para allá, trate de hacer que esperara pero ya sabes como es, dice que viene por ti para ir a cenar-. ¿Mike?, ¿aquí?, que mosca le pico, pensé para mis adentros, suspire resignada y Edward frunció el ceño ante mi reacción.

-No te preocupes Angie, aquí lo espero-.

-¿Quién es el Sr. Newton?-pregunto mi hermano con tono serio.

-Es Mike, Mike Newton-, le respondí sin ánimos, la verdad no tenia muchas ganas de ver a mi “casi algo”.

-Ah ya recuerdo,..y, es tan malo??-, pregunto Edward aun serio al ver mi expresión apática.

-Solo no tengo ganas de verlo, es todo-. En ese momento la puerta se abrió y Mike entro dirigiéndose a mi escritorio, sin notar a Edward... supongo. Me pare al momento que el me saludaba, dándome un ligero beso en la boca.

-Hola, preciosa, que te parecería acompañarme a cenar hoy, suena bien no???-, pregunto Mike viéndome, aun sin notar que Edward estaba sentado justo atrás de el, pero antes que pudiera decir algo mi hermano hablo.

-Iba llevar a Bella a casa, no se siente muy bien-, Mike volteo hacia mi hermano bruscamente y después hacia mí con una cara que reflejaba, confusión, enojo, ¿reclamo??..

-Mike, el es Edward mi hermano, hace una semana que llego de Londres-, Mike se giro nuevamente mientras Edward le extendía la mano, mi “casi novio”, devolvió el gesto de manera enérgica, para después volverse hacia mi, -Preciosa, entonces que dices-, genial Mike se estaba saltando olímpicamente lo que Edward había mencionado hace unos momentos. Mis ojos viajaron hacia mi hermano que tenia la mandíbula tensa, quise relajar la situación, que era de verdad extraña.

-Mike, lo siento, de verdad hoy no tengo ánimos de salir, no me siento muy bien, podemos dejarlo para otra ocasión de verdad-, pude visualizar que la postura de Edward se relajaba y se recargaba en la pared al lado de la puerta de la oficina.

-Ni hablar, preciosa, me voy, te llamo después-, dijo algo confuso, dándome un beso que hice, fuera en la mejilla, y se dirigió a la puerta, -Un gusto-, dijo en tono cortante a Edward antes de salir.

Mi hermano cerro la puerta tras el, y yo me deje caer en la silla nuevamente, era claro que no iba a verlo otra vez, no podía estar en una semi-relación que no me llevaba a ningún lado, ni siquiera me gustaba salir con Mike. Tome mi bolso y me dirigí a la puerta, pero antes que pudiera abrirla Edward me detuvo poniendo su mano sobre la mía que estaba en la perilla, -Bella..-, me llamo con un tono de voz bajo, casi un susurro, alce la vista para encontrarme con sus hermosos ojos verdes, sus cara reflejaba enojo o rabia contenida, pero sus ojos eran distintos parecían tristes.

-Bella, prométeme que encontraras alguien que te merezca, promételo-, me dijo mientras acariciaba mi mejilla, su mano estaba fría, pero la sensación era muy relajante, fruncí el seño al escuchar a mi hermano, sabia a lo que se refería pero no estaba segura por que lo decía en ese momento.

-No entiendo, que es lo que…-, pero sus dedos se posaron en mi boca no dejándome terminar.

-Solo digo que te mereces mas que un clon de Johnny Bravo, p-r-e-c-i-o-s-a-, enfatizo la ultima palabra haciendo referencia a Mike, quise tranquilizarlo, además ya había decidido que terminaría mi “relación” con Mike.

-Tranquilo nunca me vi como la Sra. Bravo-, le dije siguiéndole el juego, el sonrío de mi forma favilota y abrió la puerta.

Casi una hora después de la visita de John... de Mike, llegamos a la casa de Em y Rose, llevaban tres años de casados, aun no tenia hijos pero los dos se morían por tenerlos, por eso había escogido aun casa en una zona un poco mas descentralizada y con un bonito jardín, bajamos del auto y me adelante a tocar la puerta Edward se quedo tras de mi.

-Bellitaaaaaaaa-, me dijo Em, mientras me daba un fuerte abrazo, que por poco y me quita el aire.-Que bueno que llegas ya esta empezando a ver a Alice como bocadillo-, no pude ni empezar a reí cunado oí gritar a Alice-Emmet, te oí y no te puedes comer a tu hermana sabes-. Em nos invito a pasar y espere a estar en la sala donde todos estaban reunidos para presentar a Edward.

-Bueno chicos, el es Edward, mi hermano-, el presentado levanto la mano en gesto de saludo y dijo-Que gusto conocerlos-, terminando con una de sus sonrisas torcidas.

-El gusto es nuestro-, dijo dijeron Rose y Jasper casi a la par, mientras que Alice daba saltitos hacia nosotros y abrazaba a Edward, -Me da mucho gusto conocerte finalmente,- dedicándole una sonrisa, se paro de puntitas y le dijo en tono mas bajo..

-No mas becas OK..-, Yo la fulmine con la mirada pero el solo asintió con una sonrisa.

-Bueno Ed, yo no se que pienses pero ya hace hambre no???-, pregunto Emmet a mi hermano, el solo río ante el comentario y Emmet se paro gratando -¡Hora de cenaaar!-,

Los chicos se dirigieron al comedor y nosotras a la cocina para ayudar a Rose con los platos.

-Ahhhhhhhh, Bella, tendrás que tener a tu hermano encerrado si no quieres que alguien lo secuestre-, me dijo Alice mientras entrábamos a la cocina, -y eso por que???-, pregunte.

-Esta muy muy.. Bueno tu sabes además que el acento ingles le queda perfecto-, yo solo rodee los ojos, ya sabia a lo que se refería, y la verdad era que mi hermano era sumamente atractivo, pero se merecía alguien que apreciara todas sus cualidades, no solo su físico.

-Alice, te recuerdo que tienes boda en puerta, Jasper te suena el nombre???-intente bromear y ella me saco la lengua.

-Bella, estar a dieta no impide ver los mejores platillos o no Rose..-, OK estaban comparando a mi hermano con comida, voltee a ver a mi desposada amiga, quizás ella seria mas prudente-.

-Tu hermano es muy guapo Bella, admítelo-…no lo podía creer, aunque la verdad no se que me molestaba, no estaba diciendo algo malo, era la verdad pero aun así no me gustaba oírlo, de ellas.. de otras personas..

-Bueno, bueno, llevemos esto pues si no Em, es capaz de comerse a tu novio Alice-, la susodicha salia disparada al instante, Rose y yo un poco después entramos cuando Emmet le dirigía una pregunta a mi hermano..

-¿Y que me dices Ed, muchas chicas hermosas en Londres?-, no tuve oportunidad para prevenir a Emmet, cuando oí un grito detrás de mi…-Emmet de Hale, te gustaría que le preguntara a Edward sobro los hombres ingleses-, dijo Rose con un tono entre molesto y juguetón a lo que mi hermano respondió un rotundo No al mismo tiempo que negaba con la cabeza.

-Amor, solo era una pregunta, si podemos cenar me muero de hambre, podría desmayarme ahora mismo-, la escena en mi cabeza de Em cayéndose al suelo con su gran cuerpo era sumamente graciosa.

La cena fue muy agradable, nos reímos mucho, mi hermano pronto se acoplo con mis amigos, parecían caerse muy bien, todo estuvo perfecto, hasta que por alguna razón Alice saco a “Don Perfecto” a la platica y cuando Edward supo quien era se puso algo serio, hasta que se le ocurrió mencionar el grandioso apodo que el le había designado, así que Mike fue rebautizado en ese momento por mis amigos y mi hermano fue considerado la leyenda del grupo.

Platicamos un rato más después de la cena y decidimos que ya era hora de partir pues el viaje al departamento era un poco largo y no quisimos arriesgarnos conduciendo tan noche.

-Gracias Bella-, menciono mi hermano unas minutos antes de llegar al departamento, haciendo que desviara mi vista de la ventana del auto a el.

-Y eso por que???-pregunte con una sonrisa.

-Por dejarme entrar de nuevo en tu vida-, dijo mientras aparcaba el auto y se desabrochaba el cinturón. Yo me desabroche el mío y me acerque un poco a el…

-Nunca saliste-, le dije mientras me acercaba para darle un beso en la mejilla, la sensación que sentí me asusto, como miles de toques eléctricos por mi cuerpo, nunca me había sentido así, me esforcé por darle una sonrisa y que no notara mi reacción y baje del auto. Quizás algo me había caído mal, quizás el decir que estaba enferma me iba a pasar factura, pero sin duda fue una reacción extraña…..

Mira mis ojos y veras
Que siento por ti.
Explora en tu ser
Me hallaras no buscaras mas.
Dime que sientes mi calor
Y que correspondras mi amor.
Sabes que si
Todo lo que hago, lo hago por ti.

Mira mis ojos y sabras
Que nada te ocultan
Se acabo tu vez, tomame
Quisiera poder, poderte lograr
Dime que sientes mi calor
Nada quiero mas que tu amor.
Sabes que si
Todo lo que hago, lo hago por ti
No hay amor como tu
Y otro que te ame asi
No hay lugar si tu no estas
Donde quisiera estar.

Dime que tu sientes mi calor
Nada quiero mas que tu amor.
Luchar por ti, sufrir por ti
Morir asi, morir por ti.
Sabes que si
Todo lo que hago, lo hago por ti.

La canción es Everything I Do de Bryan Adams

14 comentarios:

  1. Dios!!! No puedo evitar gritar de emocion!!! No se imaginan todo lo que siento en volver a leerlo!! no me imagino ke sienten ustedes ke apenas lo leen!!!

    Ahhhh esos hermanitos se kieren mucho no???

    ahhh!!!!! Las quero y espero lo disfruten tanto como yo lo hice!!!

    Kokoro

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  2. kokoro yo ya lei el fanfic y es genial, es decir TODA LA HISTORIA woooow simplemente lo mejor. EL MEJOR ACUERDO tb es increible, podrias subirlo (:

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  3. aii mi koko .. espero k estes un poquito mejor , = un monton de besitos te adoramos no lo olvides ..

    Nerd lemmonera n2 :P

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  4. MER: Cómo estaís? Koroko espero que ya con pilas a tope no?. Gracías por subir estos capis tan geniales. Jazzy me tienes intigrada, ya que mi mente vaga conjeturando sobre lo que no cuentas. Pero seguro que la revelación mejorará siempre cualquier imaginación que no sea la tuya. Porfi pronto nuevo. Un besote para las dos desde un rinconcito de mi España.

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  5. Aunque no te comenten sigue escribiendo, que nosotros seguimos esperando por mas capis ya que este fic esta brutal, solo espero un pequeño cambio en el cual se descubra que Edward y Bella no son hermanos de verdad y se queden juntos, hacen una bella pareja no creen, adelante

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  6. realmente no quiero permitirle a mi mente sacar conclusiones con este fic, me tiene en shock y eso me encanta jeje.

    besos.

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  7. kokoroooo. Dios!! ni puedo describir lo que se siente al leer!!
    Felicidades a Jazzy W, escribe genial.
    besos

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  8. ah dios este fanfics si me encanta!! jejeje enserio tienes razon kokoro de que es muy bueno!! me encanta!! ya quiero el proximo cap!! estare pendiente por fin lo termino de leer!! ayer tenia que estudiar mucho! :S bueh pero ensereio que esta bien interesante el fic!! espero el proximo con ansias xoxo que dios te bendiga y te ilumine salud y amor! xoxo (",)

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  9. Dios!! preciosa la historia me encanta!! esta super entretenida y divertida!! espero con ansias el proximo cap escribes de fabula!! sigue asi =)

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  10. Hay!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! me encanta!!!!!!.... por favor!!!!... que lindo estoy hiperventilando, me duele el corazón besos!!!!!

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  11. OMG OME!! diossss que hermosooo koko gracias por compartirlo con nostorasss!

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  12. Madre mía!! Esto empieza a caldearse jajajaja

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  13. heyyy esta bueno el fic, pero me siento rara al leer a edward como hermano, no puedo evitar pensar en juntarlos... pero son HERMANOs!!!!!!! jajaja Tengo mucha curiosidad sobre este fic...

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Por favor dejanos tu !!AULLIDO!!... asi es, !!TU AULLIDO!!
Y que se escuche fuerte y claro ya que son los que nos alimentan a seguir escribiendo^^
Ademas seras recompensado con un Edward, o el Cullen o lobo que quieras... (Menos Jacob, ese es !MIO!)XP
Kokoro



AULLA!!

Pueden robarte cada frase, cada palabra, cada suspiro y hasta el ultimo de los alientos. Pero, hay algo que tu sabes y que todas sabemos... aunque te roben todas tus ideas siempre tendras mas y mejores, por que luego de cada golpe siempre volveras mas fuerte.
Gracias Annie...